El Queen Mary II, el crucero más grande y lujoso del mundo, metió por segunda vez la proa al puerto de Valpo y, tal como lo hizo el año pasado, dejó la cola entre los turistas del litoral.
Para que se haga una idea, la nave tiene 14 bares, 10 restaurantes, cinco piscinas y hasta un planetario. Es tan grande, que para mirarlo entero hay que pararse en Villa Alemana.
CHILENO
Después de romperse el lomo por 40 años en una compañía aérea australiana, Waldo Latorre por fin jubiló. Con el billetito decidió cumplirle el sueño a su mujer y embarcarse en un crucero around the world.
Momentos antes de subir al transatlántico, Waldo y su patrona gritaban a los cuatro vientos la cantidad de ciudades que conocerán en la aventura: Acapulco, Los Angeles, Hawai, Tobago, entre otros paradisíacos destinos, en un viaje que durará 28 carreteados días.
"Esto es lo mejor que hay. Después de toda una vida trabajando, uno tiene derecho a darse algún lujito ¿onofre?", contó.
- ¿Le alcanzará cuerda para casi un mes en alta mar?
- Demás, si me preparé un año para este momento. No hallo la hora de subirme al buque. Para mí esto es un sueño.
- ¿Sale muy salada la gracia?
- Más o menos. Son como 20 mil dólares entre los dos con la jefa, o sea, unos 12 palitroques.
- Por lo menos pida que le den una piscola de bienvenida.
- No sólo eso. Este viaje va a ser como una segunda luna de miel y lo mejor es que nos bajamos en Sydney. Echo de menos algunas comidas y el buen humor de los chilenos. Además, pese al tiempo, aún sigo siendo colocolino.
- Nadie es perfecto.
