¡Chinitas malas ya son una plaga!

A Marjorie le encantaban las chinitas. Desde chiquitita siempre jugó con ellas y hasta las defendía de otros peques maldadosos que querían arrancarles las alitas. Pero su romance con los insectos terminó de golpe.

“Iba a comprar y de repente sentí que algo me mordió. Me miré el brazo y le pegué al bicho para alejarlo. ¡Nadie me creía que me había mordido una chinita!”, recordó la víctima de 23 años.

Marjorie Michea no es la única afectada por la "Harmonia axyridis", una voraz especie de insecto asiático que se expande como la mala hierba en el terruño.

Las “chinitas malas” llegaron a Chile en 1998, cuando el Instituto de Investigaciones Agropecuarias (INIA) las trajo al país para que controlaran las plagas en algunos invernaderos. Esta especie es como tonta para el diente y devoran sin culpa hasta 60 pulgones diarios.

El drama es que desde 2008 han ido apareciendo más y más. Ahora ya no sólo se encuentran en espacios abiertos, ya que en otoño e invierno se cuelan en casas y edificios de departamentos para armar unos verdaderos “panales” que manchan las paredes y pueden causar reacciones alérgicas en las personas.

Por si fuera poco, en algunos casos como el de Marjorie, estas chinitas también muerden.

Según los reportes de los expertos, la catete Harmonia axyridis ya es una invitada de piedra en varios sectores, desde la Región de Coquimbo hasta la de O'Higgins.

En Santiago se coló en las casas de Colina, Huechuraba, La Pintana, La Reina, Las Condes, Lo Barnechea, Lo Prado, Macul, Ñuñoa, Peñalolén, Pirque, Providencia, Puente Alto y Vitacura.

¡PARE LAS ANTENAS!

Audrey Grez, doctora en Medicina Veterinaria de la Universidad de Chile, explicó que la “chinita mala” es muy distinta a nuestras especies nativas, que son más buenas que el amor de mamá, porque controlan otras plagas y ayudan al desarrollo de frutas y verduras.

"La Harmonia axyridis se caracteriza por poseer grandes dimensiones, 6,5 a 8 milímetros de longitud, mucho más grande que las chinitas usuales que miden cerca de 5 milímetros o menos", explicó.

Aparte del tamaño, la chinita asiática es ovalada y tiene las alas duras. Pero el aspecto más reconocible es que en el cogote tienen una marca negra sobre fondo blanco en forma de “M” o “W”, dependiendo de dónde la mire.

Grez indicó que la plaga no es chacota. De hecho, han dejado la mansaca en varios países europeos, Estados Unidos y Canadá.

La veterinaria señaló que aparte de colonizar las casas, la Harmonia axyridis se mete en las cosechas de uvas y berries, donde podría alterar el sabor y aroma de los vinos y jugos.

Además, esta chinita malvada amenaza gravemente la biodiversidad, porque se come todo lo que pilla a su paso, incluyendo otras especies nativas.

Si ya pilló varias de estas intrusas en su hogar, la doctora Grez sostuvo que lo mejor es comunicarse con ella y otros investigadores antes de tomar la justicia en sus manos.

"Pueden reportar el hallazgo en el sitio web www.chinita-arlequin.uchile.cl y nosotros lo ayudaremos. También puede hacerlo en el twitter @chinitaarlequin o en nuestro Facebook", detalló la doc.

COMPARTIR NOTA