Robles ha sido cuestionado por el rendimiento de la Roja en el Sudamericano Sub 20 y la falta de autocrítica. Claro que el golpe más duro lo recibió fuera del fútbol: en 2015 falleció su hija en espera de un doble trasplante, de hígado y riñón.
En octubre de 2016, Héctor Robles, que había asumido en la Sub 20 seis meses antes en reemplazo de Nicolás Córdova, tiró una frase ambiciosa, pero un tanto soberbia: "Le vamos a ganar a cualquiera, tráigannos a Argentina o Brasil. Hay equipo para ser campeones del torneo". Por cierto, Chile acabó en el último lugar de su grupo, con apenas dos empates y sin triunfos.
Aquello significó un duro golpe para Chile, pero la ANFP le dio una nueva chance al "Choro", que en 2007 concretó su jubilación como futbolista, con 36.
Se formó en las inferiores de Palestino y se convirtió en uno de sus jugadores históricos, pero fue en Wanderers donde se destapó y hasta llegó a la Selección.
Tal cual, pues Robles integró el equipo caturro que obtuvo el ascenso a Primera División en el 2000, y un año después se coronó campeón del fútbol chileno siendo capitán de la escuadra de Valparaíso. Incluso, jugó Copa Libertadores y Sudamericana en dos ocasiones, y ya consumado su retiro, inició su carrera de DT.
Primer desafío. Robles asumió como ayudante de Yuri Fernández, en Wanderers, en un momento complejo del club, y ante la salida del técnico agarró el joystick de manera interina. Al final, el club bajó. Fue entonces cuando Robles pasó a las divisiones inferiores de la "U", donde su principal logro fue el campeonato a nivel Sub 16 mediados del año 2011.
En 2014 fue jefe de las divisiones menores del cuadro caturro, y durante ese tiempo el club promovió a jóvenes jugadores, como Agustín Parra y Gabriel Castellón. Claro que el gran salto fue el 2016, cuando llegó a la Sub 20. Y tras el fracaso de Ecuador y la nueva oportunidad, se pensó en la "resurrección", pues la Rojita ganó tres torneos.
Así como lee, pues Chile campeonó en SBS Cup de Japón, el Sport for Tomorrow de Paraguay y los Odesur, totalizando seis triunfos y cinco empates, entre agosto de 2017 y junio de 2018. O sea, habían motivospara ilusionnarse, pero Chile, jugando en casa y con la ambición de clasificar al Mundial de la categoría y los Panamericanos, apenas ha conseguido dos empates.
Gran pena. A raíz del complejo panorama y los cuestionamientos por su falta de autocrítica, Robles tiene la posibilidad de tapar bocas la próxima semana y, por qué no, intentar nuevamente torcerle la mano al destino, uno que el 2015 le dio el golpe más duro que puede recibir un padre: su hija Gabriela, que entonces tenía 21 años, falleció, en espera de un doble trasplante de hígado y riñón.
La joven nació con un problema al hígado y Héctor siempre dio batalla para que pudiera salir adelante, lo mismo que su hermano Andrés, quien siguió los pasos de su papá. El jugador está actualmente en San Luis y posee el récord de ser el jugador más joven en debutar como titular en la Primera, con 16 años.