Se trataría de uno de los dispositivos cuyas imágenes fueron destruidas por funcionario policial que participó en operativo donde murió Camilo Catrillanca.
En el marco de la investigación tras la muerte del comunero mapuche Camilo Catrillanca, la Fiscalía reveló "incrongruencias" en los relatos de los funcionarios policiales que participaron del polémico operativo policial.
Durante la mañana del domingo, el ministro Chadwick confirmó que uno de los cuatro carabineros presentes al momento de la muerte Catrillanca eliminó la grabación de video y destruyó la tarjeta de memoria.
"Se ha podido comprobar que uno de los miembros de la patrulla del Gope que acudió a los hechos, que inicialmente había señalado que no tenía ni contaba con cámara de vigilancia, sí tenía, como correspondía al cumplimiento de su deber. Y que la tarjeta de memoria de esa cámara la destruyó. Eso no lo vamos a tolerar", dijo Chadwick.
Horas antes, basado en los primeros informes policiales desde La Araucanía, el general director de Carabineros, Hermes Soto, aseguraba que los funcionarios no portaban cámara.
Para este tipo de operativos, Carabineros utiliza cámaras GoPro, en las que se invierte una importante cantidad de dinero.
De acuerdo a información de Mercado Público, en junio de 2018, Carabineros de Chile recibió la compra de 80 cámaras GoPro a cambio de US$39.091, un poco más de $26 millones.
En detalle, la institución policial gastó US$419 por cada una de las cámaras de video GO-PRO Hero5 Black, adquiridas a la empresa Helpnet Ingeniería y Servicios Recursos Humanos.