La OEA declaró ilegítimo el nuevo gobierno del presidente de Venezuela y Washington anunció que aumentará la presión "sobre el régimen corrupto".
Con muy poco apoyo internacional, Nicolás Maduro juró ayer como presidente de Venezuela para el período 2019-2025, en lo que será su segundo periodo en el Palacio de Miraflores, donde llegó en 2013 tras suceder a su mentor y fallecido líder, Hugo Chávez.
"Es claro, público, notorio y conocido que Venezuela es centro de una guerra mundial del imperialismo norteamericano y sus satélites", dijo Maduro al momento de tomar posesión del cargo. " Llueva, truene o relampaguee, Venezuela va a seguir por el camino de la paz" añadió.
El nuevo perÍodo de Maduro se da tras triunfar en las elecciones de mayo de 2018, las que fueron desconocidas por Estados Unidos, la Unión Europea y la mayor parte de América Latina, incluido Chile, que pidieron al gobernante no asumir nuevamente la presidencia.
Poco antes de su juramentación, Washington anunció que aumentará la presión "sobre el régimen corrupto, apoyando a la democrática Asamblea Nacional (Parlamento) y pidiendo democracia y libertad en Venezuela", escribió el consejero de seguridad nacional de la Casa Blanca, John Bolton en Twitter.
Por su parte, la Organización de Estados Americanos (OEA) acordó hoy "no reconocer la legitimidad" del mandato del presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, y llamó a que se celebren nuevos comicios "en una fecha cercana" con observación internacional.
Además, el presidente de Paraguay, Mario Abdo Benítez, anunció la ruptura de relaciones diplomáticas con Venezuela y el cierre de la embajada paraguaya en Caracas.