En medio de la polarización política, diputados de todas las bancadas criticaron con firmeza la suspensión de actividades en el Congreso. ¿La razón? Problemas de movilización entre Valparaíso y Santiago por el paro nacional.

El momento más tenso se vivió cuando los diputados René Saffirio y René Alinco (independientes) encararon al presidente de la Cámara de Diputados, Iván Flores (DC), quien decidió suspender las actividades.

El duro round se dio en uno de los accesos al Congreso, con Alinco impidiéndole el paso a Flores. "¿Cuándo renuncia? ¿Qué autoridad tiene él para suspender la sesión?", preguntó el independiente, mientras el parlamentario DC trataba de salir del lugar.

"Espero que tengas pantalones para renunciar por el daño que le has causado a la Cámara de Diputados. ¿Cómo que no haga un punto? Estoy más que en mi derecho. No estoy disponible para que un presidente de la Cámara por el cual yo he votado tome decisiones unilaterales, absurdas", le encaró Saffirio a Flores.

Congreso con candado

"Ese fue un hecho bastante violento, encerrar a un parlamentario cualquiera sea, acusarme de estar mintiendo, que no es así, nadie puede tratar de mentiroso a otros si no tiene los antecedentes", expresó Flores.

La diputada humanista Pamela Jiles utilizó su cuenta de Twitter para mostrar su descontento: "Muy inadecuada decisión cuando el Congreso debería trabajar 24 horas diarias para asumir demanda ciudadana".

"No se puede estar avisando a última hora. No me parece lógico ni prudente que el Congreso deje de funcionar cuando hay varios parlamentarios acá", señaló, por su parte, el diputado UDI Ignacio Urrutia, quien, por esta vez, se alineó con Jiles.