Richard Joseph es un haitiano que hace tres años llegó a Chile, como muchos de sus compatriotas, en busca de una mejor vida.
Y lo consiguió. Con mucho esfuerzo y trabajo. el hombre de 40 años logró salir adelante. Tiene pega estable y un hogar. Todo tranquilo. Corriente. Pero en la tarde del sábado su vida cambió de una forma que sólo se ve en las películas.
Eran las 17 horas en avenida Independencia con calle Olivos, al lado de la Municipalidad. Una mujer, por razones que se investigan, colgaba desde el balcón del noveno piso de un departamento. Ante los gritos de la gente que trataba de impedir que la persona se lanzara, y mientras otros grababan la situación, Joseph corrió hasta el lugar.
Primero atinó a grabar con su celular, pero luego se percató que podía amortiguar la caída y se ubicó en el punto indicado para poder salvarla. Y así lo hizo. La mujer se encuentra con riesgo vital en el Hospital Salvador y el haitiano terminó con una pierna lesionada.
Tras el acto heroico, Richard fue trasladado hasta el mismo centro asistencial y fue rápidamente dado de alta. "Aún tengo dolores en la rodilla", contó con el corazón inflado de orgullo.
A pesar de la valentía y el reconocimiento de los chilenos, el hombre reconoce que aún no dimensiona el protagonismo que ha tenido tras el incidente.
"Uno no se levanta por las mañanas pensando que va a salvarle la vida a otra persona. Yo sólo ayudé", contó en el living de su casa, y con una bota ortopédica por la lesión.
"Tengo la rodilla con mucho dolor aún, me tuve que pagar sólo la urgencia en el hospital, aunque tras todo esto se me acercaron mucho para ofrecerme ayuda y me colaboraron para costear los gastos", reconoció.
De todas maneras. Joseph no quiere que se le reconozca por su acción de "salvador". "Quiero que nos ayuden siempre a los extranjeros, no sólo ahora que pasó esto", remató.
Habla Richard
Richard Joseph aún no se recupera de la caída tras salvarle la vida a una mujer el sábado pasado, y ante su travesía por programas de TV y los llamados de los medios, reconoce que ante el "aprecio que he recibido por este acto quiero recalcar que esto lo hubiera hecho por cualquier persona".
- ¿Cómo recuerda ese momento?
- Cuando ella cayó a mis brazos me doblé el tobillo y la rodilla, y nos caímos. Cuando la miré pensé que no había logrado nada, ya que le salía sangre de su boca y no respiraba. Afortunadamente a los tres minutos recuperó el aliento y dio signos de vida.
- Mientras todos grababan, atinaste a ir y salvarle la vida...
- No lo pensé dos veces. Había que salvarle la vida aunque doliera. Me complica un poco hablar de esto, ahora me ven como héroe, pero es una vida la que estaba en juego y uno no piensa mucho y solo actúa.
- ¿Y ahora cómo está usted físicamente?
- Estoy con mucho dolor, tomando medicamentos. Ando un poco mal genio a ratos, con la pierna en mal estado, cansado la verdad, han sido días muy raros a los cuales no estaba acostumbrado. Mi vida consistía en trabajar, estar con mis amigos, la Organización Buena Onda que tengo con mis compañeros, y sobre todo salir a comer.
- Hace tres años llegó a Chile, ¿cómo lo ha tratado el país?
-Son un buen país, son trabajadores y salen adelante siempre. Me gusta esta sociedad, pero hay que reconocer que a veces igual aparecen algunos "tontitos" que lo tratan mal a uno o te miran distinto, pero en general me gusta Chile.
- ¿Cómo se gana la vida, Richard?
-Trabajo como agente de servicio al pasajero en el Aeropuerto de Santiago. Me levanto temprano, tomo desayuno y me encargo de hacer el Check-In en Copa Airlines. Aunque ahora con los programas y las invitaciones me tendré que levantar más temprano, jajajá.
- ¿Qué es lo que más le llama la atención del pueblo chileno?
-Son gente muy amable en verdad, ahora sobre todo, que se me han acercado harto para hablar conmigo. La verdad es que no me gusta la fama ni sacar plata por esto que hice. Quiero volver a caminar tranquilo por acá y comer sopaipillas todo el día, que es lo mejor que tiene este país, jajajá.
- ¿Qué le dijeron sus amigos y cercanos tras este acto heroico?
- Mis amigos siempre me lanzan bromas, exageran todo. Yo sólo espero que esto pase luego y pueda llevar una vida normal. Me gusta el estilo que estaba llevando, aunque si llegan nuevas oportunidades, no sé, estoy feliz con mi trabajo y espero seguir así. La tranquilidad es lo que más me gusta y ahora están todas las luces sobre mí. Todos se disputan al "negro", jajajá, pero yo estoy tranquilo y quiero recuperarme.
Vive con dos amigas
Richard Joseph llegó solo al país y vive con dos amigas chilenas.
Tiene 40 años, pero luce mucho más joven. Su sentido del humor es lo que más destaca, incluso sentado en el sillón de su casa, con una bota ortopédica en su pierna derecha y con dificultades para desplazarse.
El haitiano, que desempeña labores en el Aeropuerto Arturo Merino Benítez, es cuidadoso de su pega y en su tiempo libre comparte con amigos y la Organización Buena Onda.
Antes de llegar al país, realizó la misma labor en República Dominicana, a cargo del Check-In que hace en Chile.
Es apasionado por la información y constantemente revisa noticias para poder ayudar a sus compatriotas.
Dice que le hubiese encantado participar de las elecciones. "Al que conozco más es a Sebastián Piñera. Espero poder participar en la segunda vuelta. Este es un país que me ha recibido muy bien y quiero ser parte de Chile", señaló.