“Le rompieron un brazo y le dañaron el hígado. Llegaremos hasta las últimas consecuencias y que se sancionen a los culpables”, explicó la madre de la víctima.
“No solamente son los golpes lo que le dejarán marcas, sino que también es el tema psicológico”, le dijo Yohana Villalobos ayer al diario El Día. Hablaba de su hijo, un menor de 14 años que el pasado jueves fue agredido por unos 15 integrantes del fútbol joven de Coquimbo Unido al interior del complejo Las Rosas. El argumento de ellos, digamos su versión para apalear al menor, es que habría robado un par de zapatos de fútbol.
De la golpiza, acusa la familia de la víctima, también participó activamente un técnico del cuadro aurinegro. La habría propiciado como un castigo:
“El vivir una situación de este tipo, ser brutalmente golpeado es muy fuerte para cualquiera. Quedó muy traumado y su amigo igual, que me dice ‘tía, perdón por haberlo invitado’, pero no es su culpa, los niños van donde los invitan a jugar fútbol, más cuando es su sueño y quizás con esto se vea truncado”, explicó Villalobos.
Sobre el estado de salud de su hijo, sostuvo que afortunadamente ayer abandonó la Unidad de Cuidados Intermedios del Hospital de La Serena y fue posteriormente trasladado a la Unidad Pediátrica del recinto. Su evolución, aunque lenta, ha sido positiva pese a los graves golpes que recibió. De hecho, subraya Villalobos, el menor no podrá realizar ninguna clase de deportes en largos meses. Además de fútbol, a él le gustaba practicar judo. Claro, cuando vio a su hijo llegar, lo vio con lesiones importantes y vomitando sangre, según denunció en el retén de Carabineros de La Higuera.
“Era lo mínimo que podía hacer luego que dejaran a mi hijo con una lesión pulmonar y renal, le rompieron un brazo y le dañaron el hígado. Llegaremos hasta las últimas consecuencias y que se sancionen a los culpables”, disparó la madre.
“Estas personas incentivaron a los otros muchachos a golpear a mi hijo. Los únicos que me han contactado con nosotros son el alcalde de Coquimbo, Alí Manouchehri, y el seremi de deportes con los que me reuniré en los próximos días”, completó la mujer, asegurando que nadie desde el cuadro pirata se ha acercado a la familia.
En tanto, desde Coquimbo Unido emitieron un comunicado donde explican que el incidente es confuso, ya que hay distintas versiones y no cuentan con todos los antecedentes.
Al respecto, se puede leer en el texto que la institución inició una investigación sumaria, “que esperamos no dure más de 5 días hábiles, de modo tal que se pueda determinar el lugar en que habrían ocurrido los hechos (ya que existen versiones contradictorias) y evaluar si existe responsabilidad de algún funcionario de la entidad pirata”.
Por el momento, y a la espera de los resultados, desde la directiva aurinegra tomaron la decisión de suspender de sus funciones al entrenador de la serie.
Revisa aquí el comunicado íntegramente:
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