Cada vez que uno mira a Mario Salas al borde de la cancha se podría hacer una pollita pa' apostar en qué minuto se le suelta la cadena. El deté de la UC aletea, reclama y reta a sus pupilos, sin embargo ayer en la Ruca simplemente se fue a negro.
Y es que la presión con que su equipo llegaba a Macul era grandota por las tres derrotas seguidas y más por un inédito esquema pa' enfrentar al Colo que le terminó sacando canas verdes.
La apuesta de los tres en el fondo duró menos que el sueldo en marzo luego de que Paredes abriera la cuenta y de ahí en más fue el "Chiki" Cordero quien recibió la mayoría de las empapeladas justo por que corría por la banda comunacha.
El desastrozo rendimiento de sus perniles en la primera pata hizo que el mezquino 1-0 fuera la esperanza pa' arreglar el mono en el descanso, pero lejos de eso, el "Comandante" ya andaba con la vena hinchada y la agarró con la mitad del plantel albo.
Camino al camarín, Salas habría insultado a Esteban Paredes y eso inició una serie de cruces que llegó al máximo cuando fue Guede el que metió cuchara y solo la reja que los separaba impidió que la cosa pasara a mayores.
SE QUEDARON PIOLITA
Toda esta escenita la sapeó Pato Polic, cuarto juez del partido, quien esperó el retorno de los equipos pa' expulsar al deté.
Tras la mocha, ni los pitos, ni Guede, ni Paredes quisieron tocar el tema, mientras que Salas viró en mute y seguro preocupado por la caída libre de su equipo, que encima debutará el martes por Copa Libertadores.