Durante el breve trayecto entre el carro de la PDI y el cuartel policial, Ariel Eduardo Mena Suazo, de 18 años, fue abordado por unos periodistas y no quiso responder sus preguntas, aunque con los puntapiés que les lanzó dijo mucho sobre su personalidad y vida ligada al crimen desde la más tierna infancia.
La madrugada del lunes se le terminó la fiesta criminal que lo ha llevado a ser detenido 21 veces por diversos delitos contra la propiedad, porque el delincuente conocido como "el Mono Chico" fue capturado por carabineros de Peñalolén, después de asaltar una casa en calle Lorelei, en La Reina.
El último no fue un golpe más, porque el adicto a la pasta base fue detenido por el crimen de la matrona Carmen Gómez Peña, de 63 años, y por herir de gravedad al marido de la mujer (62) y al hijo de la pareja, con discapacidad mental, de 34 años.
Antes de huir, el "Mono Chico" echó abajo la reja de la casa con el vehículo de las víctimas y se fue con el botín, compuesto por joyas de la familia, hasta la población Víctor Jara, de Peñalolén, donde cambió las cosas por droga para luego, junto a dos amigos, continuar la juerga hasta las seis de la mañana cuando luego de una persecución fue capturado.
Querella
Según el mismo ha declarado, ocho años tenía el "Mono Chico" cuando comenzó a robar en supermercados y grandes tiendas, pero en los registros policiales la primera detención del imputado data de 2011, cuando con 11 años participó en un asalto a una casa en Las Condes con dos quinceañeros. Fue capturado y declarado inimputable, por eso volvió a su hogar en Peñalolén.
Mena Suazo ayer pasó a control de detención y mañana será formalizado por robo en lugar habitado, asesinato y lesiones graves gravísimas en contra de los sobrevivientes, que ya están fuera de peligro de muerte.
Recién a principios de mayo el imputado había salido de la cárcel por un portonazo al que se lo vinculó y del cual se investiga su participación, además hace dos años había asaltado una casa ubicada en la misma calle Lorelei, a sólo un par de cuadras del mortal asalto.
Su prontuario es grande y, resumiendo, desde lo más reciente se puede consignar que el año pasado cayó en Santiago por el robo de un vehículo motorizado, en La Reina, por robo con intimidación y también por hurto en supermercado. Ese mismo año, en Peñalolén, fue aprehendido por robo en bienes nacionales de uso público y en Providencia lo atraparon por portar elementos para cometer delitos.
El año anterior las denuncias son similares: cayó por robo en lugar habitado en La Reina, receptación en Peñalolén y portar elementos para cometer delitos en Providencia.
Además, cuando era menor de 16 años fue detenido también por portar elementos para cometer delitos, hurtos en supermercados, receptación, dos robos en lugar habitado y un robo en lugar no habitado.
Dados esos antecedentes, el Gobierno se querelló en su contra y pidió presidio perpetuo. El ministro del Interior, Andrés Chadwick, dijo que "esperamos que los tribunales de justicia puedan hacer también su trabajo, porque un crimen de esta envergadura es muy grave y el Gobierno espera la máxima pena".
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