El brutal ataque contra la pequeña Sophie, de un año y once meses, conmociona a Chile. El crimen que habría perpetrado su padre llevó, incluso, a crear un movimiento en redes sociales llamado #LeySophie. ¿La idea? Endurecer las leyes contra aquellos que abusan y maltratan a los niños.
Al igual que en este caso, otros delitos de menores generaron completo repudio nacional. Uno de los más recordados fue el protagonizado por Ramón Castillo.
ANTARES DE LA LUZ
Ramón Castillo Gaete fue un músico chileno que saltó a la fama por liderar la secta del Colliguay. Conocido como Antares de la Luz, el hombre de 35 años y pronunciada barba, fue acusado de quemar vivo a un recién nacido como parte de un ritual para salvarse del fin del mundo. El delito ocurrió en Quilpué a fines de 2012 y fue denunciado por la madre del lactante. Tras escapar a Perú, Castillo se suicidó en el Cusco en 2013.
CASO ROJO
Según dictaminó la Justicia, Jeannette Hernández atacó con un martillo a sus dos hijos en enero de 2008. Producto del arrebato, mató a Esteban (8) y le provocó daño cerebral a Pablo (15). ¿Las causas de la agresión? Presuntos celos enfermizos en la relación que sostenía con el padre de los pequeños.
PARRICIDIO EN CURICÓ
Tras una supuesta discusión con su esposa, el médico pediatra Francisco Ramírez Alvarado (50) disparó y dio muerte a sus tres hijos, para finalmente quitarse la vida en Curicó. José Miguel (17), Juan José (16) y Sebastián (14) fueron las jóvenes víctimas del hombre.
MATÓ A HIJASTRO
A 60 años de cárcel fue condenado Osvaldo Quiroz Zamora, quien fue acusado de golpear y abusar sexualmente de su hijastro Ismael (4). El hecho ocurrió en la comuna de San Bernardo en julio de 2015, aunque la condena recién se conoció en 2017.
"Aprovechando, el acusado, que su conviviente y madre de los menores (…) se había retirado del domicilio (…) agredió, maltrató y torturó, a la víctima (…) hechos que se llevaron a cabo en presencia de su hermanos", detalló el fallo de tribunal sobre el caso.
ARROJÓ NIÑA AL MAR
En agosto de 2009, Juan Saavedra reconoció haber secuestrado y arrojado al mar a Francisca Silva (5), en Valparaíso. Tras presentar cargos por homicidio con violación y sustracción de menores, la Fiscalía confirmó que la niña fue lanzada viva al agua.