Aunque el renombrado "mal de ojo" mete cuco entre los veteranos, las generaciones más contemporáneas apenas pescan su real incidencia. Al menos, así juran los que cachan del tema.
"El mal de ojo sí existe y viene desde la envidia. Es mirar mal". Con esta frase, la terapeuta espiritual Katherina Ceriani confirma la presencia de oscuras energías que provienen de la mirada.
"Es a través de nuestros ojos desde donde sale toda nuestra energía y cuando una persona hace un mal de ojo, vuelca todo lo negativo que siente. La envidia escapa desde ahí a la otra persona", explica la caperuza Complettitud.
Lo cuático es que existirían distintos tipos de mal de ojo.
"Está el mal de ojo como envidia. Un sentimiento que la persona tiene hacia otra y que se traspasa en forma de pensamiento. También están las maldiciones verbales, que como su nombre lo indica es un "mal decir" y que tiene relación con que alguien te diga algo negativo", aclara.
CONJUROS
"Finalmente están los conjuros. Algo más rebuscados y que muestran la dedicación de una persona y la concentración de esta en enviarte una energía negativa con el fin de hacer daño. En estos se conjugan la cabeza y el corazón, que se unifican con algo negativo, lo que no sólo se piensa, si no también se dice y se envía", añade.
Los receptores del "mal de ojo" pueden ser niños o adultos. ¿Cómo identificarlo? Las guaguas, por ejemplo, se ponen inquietas, no pueden dormir por las noches, sufren de alergia, vomitan, lloran sin parar y sin razón.
En el caso de los adultos, suelen sentirse agotados, con dolores de cabeza y cuáticos mareos.
CÓMO ZAFAR DE LA MALA ONDA
"Para solucionarlo debemos empoderarnos y saber que tenemos la fuerza para disolver cualquier tipo de energía negativa que llegue a nuestras vidas. Tener pensamientos y actuar de manera positiva, reformar nuestra energía", aclara Katherina.
"Un ritual que te ayudará es prender una vela blanca y una vela negra y decirle a la vela negra que saque lo negativo que hay en ti y a la vela blanca que incorpore en ti la fuerza, la consciencia y el amor. Las prendas al mismo tiempo, y luego los restos de la vela negra lo botas lejos de tu casa", aconseja.