El brígido alud en la Región de Atacama y la erupción del volcán Antuco en el "sure" fueron dos acontecimientos que dejaron la cola con víctimas fatales, lugares hechos pebre y también por la contaminación del polvo y la ceniza.
A pesar de que ambos sucesos son de características muy distintas, los dos tienen en común que han dejado localidades completamente contaminadas afectando la salud de sus habitantes.
Por lo mismo, los lugareños y gente que visita estas zonas, y que tienen polvo y ceniza pa' rato, deben cuidarse para evitar atados en sus vías respiratorias, y así, frenar las crisis en asmáticos y enfermos crónicos.
Julia Ortiz, dire de la escuela de salud de AIEP, recomienda a los compatriotas expuestos a este tipo de contaminación que deben "evitar salir de su casa de manera innecesaria y realizar deporte, acudir a las zonas con altos índices de partículas en el aire y mucho menos exponerse a la lluvia, ya que los componentes, como partículas en suspensión con alto contenido en productos químicos como el azufre, pueden generar una lluvia acida".
Además de tener cuidado con el aire contaminado, la profe de AIEP aconseja:
- Mantener limpio los espacios que se utilizan habitualmente. Lo ideal es humedecer ligeramente la ceniza y polvo antes de retirarlos y use sí o sí mascarilla.
- Utilice agua filtrada y hervida, sobre todo cuando no sepa de su procedencia.
- Lave frutas y verduras si tienen cenizas: basta lavar con abundante agua pa’ sacar la cochiná.
- Mantenga cerradas puertas y ventanas.
- En el caso de tos, dificultad para respirar, lesiones en la piel, dolor y ojos rojos, conjuntivitis aguda o inflamación, se debe acudir de inmediato a un centro de atención médica.