Las vacaciones son un momento para pasarla bien, y para ello existen diversos lugares donde ir a relajarse. Para muchos, la montaña es uno de los parajes más bellos si uno se quiere distender, pero hay que ir con cuidado por los peligros que encierra la montaña.
El tema es que las condiciones climáticas en las alturas pueden cambiar en un momento, por lo que hay que hay que ir ojo al charqui.
Según explica Darío Arancibia, montañista experto en rescate, una de las cosas en que hay que ser precavido es cuando todo se cubre de nieve. "Ahí se quitan todos los detalles, como las rocas, los ríos, arroyos o las grietas, por lo que existe el riesgo de sufrir accidentes o caídas".
Otra de las cosas que son necesarias para una expedición así, son mapas, altímetro y brújula. "Se necesitan herramientas más específicas, porque ya no sirve solamente la navegación visual, cosa que en el verano si es más factible", dice Arancibia.
Otro consejo que da el también docente de la Universidad San Sebastiáan es que si nevó en la montaña, hay que esperar al menos 24 horas para subir. "Además, hay que tener cuidado con la zonas encajonadas o con pendientes, donde la nieve se puede desprender por acumulación", alerta el experto.
Una recomendación importante es no salirse del sendero o separarse del grupo, y sobre todo ir con alguien que sepa de la expedición o subida. También es clave dar aviso a Carabineros, a la Conaf o al menos a algún familiar de que se irá a la avantura, para que pueda dar un grito de alerta en caso de extravío.