¿Culpable o inocente? El escabroso caso Demjanjuk

John Ivan Demjanjuk
John Ivan Demjanjuk

Durante 27 años fue investigado por la justicia israelita y hasta el día de su muerte se mantuvieron las dudas sobre su identidad. ¿Era un asesino en serie o simplemente un anciano jubilado?

En 1987 los tribunales de Israel juzgarían a John Ivan Demjanjuk, el hombre de entonces 66 años había sido extraditado desde Estados Unidos, y era señalado como el culpable de una serie de atroces crímenes, entre ellos ser el conocido Iván el Terrible, un guardia en el campo de concentración de Treblinka.

Dentro de todos los campos de exterminio, Treblinka era uno de los más terribles, todos los prisioneros que llegaban al lugar estaban condenados a morir, siendo la supervivencia en el campo menor al 1%.

Sin embargo, Demjanjuk negaba ser el sádico Iván el Terrible, y alegaba su inocencia frente a la corte, a pesar del testimonio de testigos. “Ese hombre que está ahí solía seleccionar a las víctimas entre los que estaban por morir. Los apuñalaba en distintas partes del cuerpo, les arrancaba pedazos de carne de sus miembros, disparaba contra los que lloraban, mutilaba la nariz y orejas de los prisioneros. Hasta lo he visto perforando las nalgas de un prisionero con un taladro.” declaró uno de los testigos presentes en el juicio.

Memorial de Treblinka
Memorial de Treblinka

Buscando a Iván el Terrible

Por años se investigó cuál sería la verdadera identidad del guardia más cruel de Treblinka, hasta que en 1975 investigadores estadounidenses descubrieron que Iván el Terrible vivía hace casi 30 años en Cleveland. John Ivan Demjanjuk tenía una familia, un trabajo y el cariño de toda su comunidad.

La sorpresa fue tanto para Demjanjuk como para su familia y vecinos, quienes lo tenían como un ejemplo local y no creían que él fuese un asesino. Tras un largo proceso de investigación, en 1986 fue extraditado a Israel para ser juzgados por sus crímenes.

Su juicio fue televisado y visto por millones de personas por casi ocho horas diarias. En este testificaron muchos testigos que lo señalaban como Iván el Terrible, sin embargo la documentación era deficiente y no servía para condenarlo, además de su constante negativa a admitir los crímenes de los que se le acusaba.

El juez del caso le ofreció a Demjanjuk confesar sus crímenes a cambio de evitar la pena de muerte, pero este se negó ya que seguía manteniendo que no era Iván Terrible. Luego de un año y medio fue condenado a muerte.

Documento de Demjanjuk
Documento de Demjanjuk

Vuelco en la investigación

Mientras Demjanjuk estaba en su celda esperando el día de su ejecución, aparecieron una serie de documentos que lo señalaban como un guardia en Sobibor, otro campo de concentración, lo que significaba que nunca estuvo en Treblinka, además de nuevos testimonios que señalaban a Iván Marchenko como el famoso Iván el Terrible. Tras esto, la Corte Suprema revocó el falló y dejó a Demjanjuk en libertad.

Tras su liberación volvió a Estados Unidos, donde aún tenía el cariño de la comunidad en Cleveland. Pero en 2009 y con el antecedente de haber sido guardia en el campo de Sobibor, Alemania pidió su extradición.

Nuevamente enfrentó un juicio, esta vez se le acusaban 27.900 muertes, todas ocurridas en las instalaciones de Sobibor, tras esto fue condenado a cinco años de prisión. Demjanjuk fue el primero en ser condenado por la totalidad de las muertes de un campo de concentración y no una en particular.

John Ivan Demjanjuk murió el 17 de marzo del 2012 a los 91 años, en libertad, ya que la corte le concedió este beneficio de cumplir su condena en casa debido a su avanzada edad.

John Ivan Demjanjuk
John Ivan Demjanjuk

Llegada a Netflix

En el 2019, Netflix estrenó la serie documental The Devil Next Door la cual en cinco episodios contaba la historia de John Iván Demjanjuk.

Dentro de la historia relatan los 27 años de investigación en contra de Demjanjuk, los juicios en su contra, su trabajo en los campos de concentración, etc. Además retrata la visión de las víctimas y hasta dónde llega la necesidad de conseguir que se haga justicia.

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