Cumbiancheras llaman a frenar abusos a evas

"A las cuatro de la madrugada, siento gritos donde mi vecina. Es don Pedro, que viene llegando. doña Antonia llora en la cocina. Pedro, el hijo, trata de protegerla de su padre. La justicia viene para todos. 'Nunca más', dice. Eso es mentira… No le pegue a esa mujer".

Parece una historia real, pero es el comienzo del tema que da nombre al primer disco de LaBanda en Flor, "No le pegue a esa mujer".

El grupete, integrado por 10 evas, se juntó hace cuatro años y desde entonces no ha parado de componer temas cumbiancheros inspirados en los dramas de nuestro país.

Macarena Arias, vocalista y una de las fundadoras del lote musical, chachareó con La Cuarta y reconoció que todas las canciones están inspiradas en cosas que ellas mismas han vivido o que las han dejado plop.

"Hace un tiempo empezaron a salir varias noticias de femicidios y mujeres maltratadas. Una vez apareció una mujer. La había matado el marido y siempre aparecen los vecinos diciendo 'sí, la pareja peleaba harto'. Así nos inspiramos para ese tema", asegura.

Si usted nunca ha escuchado a las chiquillas, seguro se imagina que el temón es un drama para cortarse las venas, ¡pero no! es una cumbia a todo ritmo. "Es que no nos gusta tanto dramatismo, preferimos la cumbia, porque es lo que hemos bailado toda la vida", dice Macarena.

Pero no sólo cantan para chantar el abuso contra las mujeres. "Tenemos un tema que compusimos porque un día estábamos en el Metro y hacía calor. Entonces hicimos esa canción para que la gente se tome las cosas con más humor, dar vuelta la situación", explica.

MULTICULTURAL

La vocalista reconoce que querían hacer una banda con puras mujeres, porque el único referente es Mamma Soul, que interpreta un estilo completamente distinto.

Es que aparte de ser puras mujeres, LaBanda en Flor está compuesta por evas de distintos orígenes. Hay una colombiana, una mapuche y hasta una francesa.

"La bajista, Carola Zúñiga, compone los temas y las demás hacemos los arreglos. Somos todas súper amigas", dice Arias y reconoce que sus ensayos son un verdadero aquelarre.

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