Eso cree el escultor Moncho Pérez, autor de la figura en piedra del personaje mitológico que fue cercenada por desconocidos en la plaza de Ancud.
Moncho Pérez lleva siete años dedicado profesionalmente a la escultura en piedra de cancagua. Antes realizó mucho oficios y el último fue como camionero. Y ahora trabaja frente a la Plaza de Armas de Ancud, el mismo lugar donde seis obras de su autoría recuerdan desde el 2012 a personajes mitológicos de Chiloé.
Pero como nunca faltan los descerebrados, una de sus obras sufrió un cobarde atentado. La víctima fue una Pincoya de escala humana que estaba sentada con una mano extendida en señal de abundancia, y con la otra acariciando a un bello lobito.
"La noche del sábado fue el ataque. El domingo me pasó a avisar un turista de Santiago que se había tomado una foto con la figura de la Pincoya ese mismo día más temprano. Me dijo que la cabeza estaba cortada a la altura de cuello, que había sido decapitada", dijo Moncho.
Sobre los responsables de la tontera, el escultor contó que "no me atrevo a decir quién fue, acá están todos indignados, los están buscando Carabineros e Investigaciones y ojalá los pillen, porque hay un costo que afrontar para la reparación".
- ¿Tiene arreglo entonces?
Sí, tiene reparación, pero ya no va a ser 100% de cancagua; voy a tener que meterle unas cositas sintéticas para tapar algunos hoyitos que se hicieron, pero tiene reparación, gracias a Dios.
- ¿Había pasado algo así antes?
Sí, ya había sido dañado el Cai Cai Vilú, también le cortaron un pedazo de cabeza. Después me avisaron que se supo que el que lo había hecho tuvo un accidente y falleció más quebrado que como quedó el Cai Cai Vilú. No sé si sería coincidencia, pero el que hizo esto que espere lo mismo, porque acá la mitología se va a encargar de hacer justicia.
- ¿Cuánto cuesta el arreglo?
El valor de la restauración para pegar la cabeza lo calculé en unos 500 mil pesos, pero si quieren hacer una escultura nueva les va a salir cinco millones.
- ¿Y nada se sabe quiénes fueron los tontos?
Yo pienso que puede haber sido gente de acá, que con una borrachera decidieron destruir esto. Y estoy seguro que el turista no fue, porque es el que está más apegado a la cultura mitológica de Chiloé y por eso mismo viene, tiene que haber sido alguien de acá.
- ¿Ahora los vándalos deben está con miedo de la maldición?
Sí, y además la gente de acá dijo que si los detienen los van a ir a esperar al juzgado, otros dicen que los van a matar, hay un tremendo cagüin. Yo llegó hasta ahí.