Asesora de Minsal sostiene que el objetivo es disminuir factor de riesgo de suicidios.
En la última conmemoración del Día Internacional de la Salud Mental, el pasado 10 de octubre, la OMS reveló una cifra que muy preocupante. El 50% de las enfermedades mentales en adolescentes surge antes de los 14 años.
En nuestro país tenemos la triste realidad que uno de cada 5 personas sufre alguna patología de esta área y el desalentador récord de ser la nación donde los peques de menos de seis años tiene la peor salud mental del planeta, según una investigación reciente realizada en 24 países.
Chile, además, llegó a ser comparado con naciones como Corea, pues en la década del 2000 el suicidio se incrementó en todas las edades y en el rango de 10 a 14 años se elevó de 1 por 100 mil habitantes a 2,2, según un estudio de la Universidad Católica y el Minsal. Datos actuales señalan que el 2015 esta cifra disminuyó al 1,7.
Pese a la baja, los expertos estiman que entre los 10 y 19 años los jóvenes fallecen principalmente por accidentes de tránsito, y luego por violencia, entre ellas la autoinfringida. Pero la situación más grave es que por cada muerte intencional se estima que hay 20 intentos de suicidio y que 50 adolescentes presentarían pensamientos de muerte o ideación suicida.
Es por ello que cobra tanta relevancia la información de que el Gobierno incluiría la depresión infantil entre 10 y 15 años en el Auge 2019, según reveló María Paz Araya, asesora del departamento de Salud Mental del Ministerio de Salud.
Según la profesional, "una de la explicaciones que se han dado de cómo impacta la política pública en la reducción de tasas de depresión se debe a que tenemos GES, que es el factor de riesgo más importante para mayores de 15 años. Y ahora se va a implementar -que es lo más seguro- la depresión de 10 a 15 años; así cubrimos de 10 años en adelante la depresión, como factor de riesgo principal de suicidio".
La profesional agregó que al sumar la depresión desde más temprana edad, sumado a que "tenemos GES para trastorno bipolar, de esquizofrenia y para tratamiento de alcohol y drogas en menores de 20 años", se trabaja de mejor manera la salud mental de los jóvenes y niños, ya que las tres patologías mencionadas "son las que más se asocian a suicidio".
Para el decano de la Facultad de Psicología de la Universidad San Sebastián, Claudio Orellana, "sería una muy buena noticia porque desde el punto de vista de salud pública el Estado tiene que intervenir y cuidar a su población desde el más breve desarrollo (...)también, porque en trastornos del ámbito de la afectividad, específicamente la depresión o cuadros de angustia, pueden tener impactos importantes en el desempeño académico de los niños".