Con cafés y restaurantes funcionando a un cuarto de su capacidad y con adultos mayores paseando por las calles, estas regiones dan los primeros pasos del país hacia el fin de las cuarentenas.
En medio de mucha incertidumbre se vivió ayer el primer día de desconfinamiento en el país tras cuatro meses de pandemia, y fueron las regiones de Los Ríos y Aysén las que partieron con la medida, eso sí, rodeados por un estricto cordón sanitario.
A primera hora del día, varios trabajadores de restaurantes y cafés del sur de Chile llegaron hasta sus locales para comenzar con la venta a un 25% de su capacidad, y con todas las medidas preventivas anunciadas por el ministro de Salud, Enrique Paris, que apuntan al uso de mascarillas, el control de temperatura, sanitización de los locales, entre otros.
Uno de ellos fue la emblemática cervecería Kunstmann de Valdivia (ver recuadro), lugar al que asistieron el intendente de Los Ríos, César Asenjo, y la Seremi de Salud, Regina Barra.
"El llamado más relevante es a tomar este plan de desconfinamiento gradual con prudencia y responsabilidad. No nos cabe duda que los empresarios gastronómicos y agrupaciones deportivas harán esto con las debidas precauciones", apuntó Barra.
La autoridad sanitaria aprovechó la instancia para recordar las sanciones que arriesgan los recintos que no respeten las medidas de prevención, con multas que alcanzan las 40 UTM.
"En caso de detectarse infracciones, se levanta un sumario sanitario y se define la prohibición del funcionamiento del local inmediatamente", agregó.
Y a pesar de la esperada reapertura, los locatarios dejaron en evidencia que los clientes no llegaron en masa. "Ha sido un poco lento al principio. Abrimos a las 12:30 aproximadamente porque volvimos a repasar todos los protocolos con el personal y colaboradores. Va lento, pero arriba está lleno -según la medida del 25%-, y estamos cumpliendo con el distanciamiento de un metro y 20 centímetros entre las mesas", señaló Mariana Secco, gerente del Café Cassis Valdivia.
Más al sur. En la Región de Aysén, en tanto, la situación fue diferente. Según comentó la intendenta, Geoconda Navarrete, en el primer balance hecho al mediodía sólo 6 recintos gastronómicos optaron por abrir sus puertas en la primera jornada del desconfinamiento.
"Acá los locales son más pequeños. Estamos hablando de cafés que con una capacidad para 20 personas hoy van a poder funcionar con cinco", apuntó Navarrete.
Según expresó la autoridad regional, la medida de funcionamiento para estos locales es sólo una "posibilidad de reapertura y no una obligación", y agregó que están en constante comunicación para apoyarlos.
"Están muy interesados en tener un proceso de acompañamiento para tener las certezas de que cumplen con todas las medidas necesarias", agregó.
En cuanto al regreso de las cirugías, la intendenta agregó que "ahora se nos permite hacer un reagendamiento de más de 600 cirugías que quedaron pendientes por la pandemia".
Cabe señalar que el ministro Paris aseguró en medio del balance diario que ninguna de las medidas adoptadas para estas regiones es fija, y señaló que ante cualquier rebrote "daremos marcha atrás".
La reapertura fue a medias
A pesar de que se autorizó el funcionamiento de restaurantes, cafés, cines y teatros a un cuarto de su capacidad, varios de estos locales se mantuvieron al margen de la reapertura este primer día.
"La noticia fue un poco inesperada y no teníamos ni los recursos para comenzar a funcionar ni cumplíamos con todos los requerimientos, así que la mayoría prefirió ir abriendo de a poco en la semana y el resto ya a fin de mes", comentó Patricia García, dueña del café-restaurante "Expres" de Coyhaique.
Quien si abrió fue el restobar Más Río de Valdivia, uno de los únicos dos locales que levantaron la cortina en el emblemático barrio Esmeralda, pero sólo para retiro. "Nos es muy caro tener un movimiento casi al 100% del local para recibir un ingreso de sólo el 25%", dijo el dueño del establecimiento Leonardo Mancilla.
En cuanto a los cines, estos se mantuvieron cerrados.
Adultos Mayores salieron a pasear
Fueron pocos, pero de igual forma algunos adultos mayores decidieron aprovechar el levantamiento de las medidas restrictivas para salir a dar una vuelta por las calles y plazas de las regiones de Aysén y Los Ríos.
¿La razón? Según cuentan los mismos vecinos de la zona, no se sintió mucho la cuarentena, porque a diferencia de las ciudades grandes, ellos están acostumbrados a vivir en espacios más amplios.
"Uno que vive en el campo tiene las libertades que no tiene la gente de Santiago, Concepción o Puerto Montt, por ejemplo. Por eso el confinamiento no es un problema, ya que nos movemos poco a la ciudad", comentó Rodolfo Lehnebach de la comuna de Paillaco, que de todas formas salió a pasear.
Volvió clásica Kunstmann
La emblemática cervecería se preparó con tiempo para cumplir con todas las medidas de prevención impuestas por la autoridad sanitaria, funcionando a media máquina en su primer día.
Entre las acciones que tomaron se implementó un servicio de reserva para acceder a una de las 68 sillas que puso como límite para funcionar, además de un control vehicular mediante barreras de acceso, control de temperatura en los ingresos, sistemas de trazabilidad, entre otros.
"Estamos muy contentos con esta primera jornada, pero sin dejar de preocuparnos y tomando bien en serio lo que se viene, porque sabemos que esto es sólo una primera etapa de un retorno que va a ser muy progresivo", comentó el gerente general de la cervecera Cristóbal Kunstman.
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