Hay que ser muy vaca y leso para engañar a una hermosa mujer, y mucho más baboso si ella clasificó a la final del Miss La Pintana.

Es el caso de dos de las doce chiquillas que la noche del 24 de enero disputarán el cetro del concurso de belleza que será animado por el actor Juan Falcón.

Tábata Pinto tiene 19 años, recién egresó del colegio con un promedio de 5,0 y está soltera porque la dejaron por otra.

“Me engañaron, me traicionaron, y lo peor es que fue con una mina horrible que conozco. Por lo menos me pudo haber puesto el gorro con una mina más linda que yo”, se quejó la chica que sueña con ser farandulera como Adriana Barrientos.

El caso de Francisca López es más terrible porque su pololo la dejó el lunes. La promotora de 18 años acusa que su hombre le fue infiel y que aun así tiene la cara de nalga para seguirla cateteando por teléfono para que le dé una nueva oportunidad.

En materia farandulera, Francisca contó que no le gustaría seguir los pasos de Vale Roth “porque es muy suelta”. En cambio admira el legado de Sabrina Sosa, una chica “muy linda y tranquila”.

Otra candidata con posibilidades de ponerse la corona se llama Nicoll Cisterna, tiene 18 años, estudia para ser ayudante de matrona y se siente feliz de haber sido seleccionada entre las 50 semifinalistas.

La Nico confesó que si tuviera que elegir a un hombre para mantener la especie su semental sería Ricky Martin, “y como es gay haría todo lo humanamente posible por darlo vuelta”.

Elena Bustos nació hace 21 años, trabaja en la cocina de un casino y su especialidad son los postres.

La colorina tatuada confesó que entre los futbolistas de la Selección el único que encuentra pasable es Waldo Ponce, mientras que al pobre Gary Medel lo halla “horripilante”.

El jurado encargado de dirimir a la ganadora está integrado por Julio César Rodríguez, Andrés Caniulef y Vale Ortega.

La candidata triunfadora se irá con 500 lucas a Buenos Aires con un acompañante, el segundo lugar se va a Iquique y la tercera a Puerto Varas.