Personal del OS9 de Carabineros detuvo a dos mujeres dedicadas a la prostitución, ambas acusadas de robo de vehículos y especies mientras ejercían su oficio.
Ambas detenidas, de 44 y 21 años respectivamente, eran madre e hija y de acuerdo al relato policial contactaban a los clientes a través de las redes sociales para reunirse en distintos moteles de la Región Metropolitana. Una vez concretado el encuentro, la menor de las detenidas drogaba a los hombres para robarles las llaves del auto y dinero en efectivo.
Según la información de Carabineros , Valentina Salas Soto (21) cobraba cerca de 100 mil pesos por la atención sexual y al momento de drogar a sus clientes llamaba a su madre y a un tercer hombre para ejecutar el robo.
"Estos tres sujetos contactaban a las víctimas a través de redes sociales donde concertaban las citas en lugares que no eran fijos. En el momento en que estaban en las citas, la madre ingresaba al lugar, retiraba las llaves del vehículo, el que posteriormente sustraía y reducía en el mercado informal", comentó Javiera García, teniente de la Dirección de Investigación Criminal.
PRISIÓN PREVENTIVA
Tras la detención, Valentina Salas fue formalizada por el delito de robo con violencia y porte ilegal de munición. Por su parte, su madre también quedó en prisión preventiva acusada de robo.
En la audiencia de formalización quedó claro que Carabineros le seguía la pista a la mujeres alertados por una serie de denuncias que coincidían con la forma de operar de las "escort".