“Creo que es un error”, le respondieron al economista.
Sergio Guzmán Lagos, director de La Polar, compartió su opinión en medio del lío judicial que enfrenta la multitienda tras ser acusada de vender ropa falsificada.
A juicio del economista, las marcas exclusivas se resistirían llevar sus productos a “grupos menos privilegiados”. Así lo dejó de manifuesto en su cuenta de Linkedin.
“Soy director de Empresas La Polar S.A. Disponer legítimamente de marcas exclusivas a grupos menos privilegiados es resistido por los incumbentes, que se resisten con cualquier medio, legítimo e ilegítimo”, escribió.
Como era de esperar, la publicación generó una ola de respuestas.
“Hola Sergio, creo que es un error. Básicamente porque la gente se da cuenta de que son productos de close out, no están las tallas completas, creo que no agrega valor a los consumidores”, le plantearon al director de La Polar.
“No manejo los aspectos técnicos pero me parece que importamos siguiendo cada vez mejores y más efectivas prácticas que logran encantar mejor a nuestros clientes, además de ofrecerles precios atractivos frente a la competencia tradicional”, respondió.
“Me parece bien la buena intención de favorecer grupos menos privilegiados. Sin embargo, quisiera ver que los favorecen con otras cosas distintas a ropa de marca. No me queda claro el aporte a sus vidas. Cómo andan en temas de sustentabilidad en La Polar?”, le consultó otra usuaria.
“También estamos en esos temas, ambos importantes en nuestra estrategia de largo plazo”, aclaró Guzmán.
La Polar contraataca
Ayer, La Polar presentó una demanda contra Under Armour por competencia desleal. Se trata de la primera de las acciones en sede civil para resarcir el daño reputacional sufrido durante los últimos días y que significó el desplome de sus acciones en la Bolsa de Comercio de Santiago.
De acuerdo a Pulso PM, la segunda demanda será interpuesta en los próximos días y será contra de la alemana Adidas.
“La Polar insistirá en que los productos son originales y que provienen de las fábricas que producen los artículos, con los derechos correspondientes. Se trata de saldos que La Polar compró el distribuidor que tenía para Chile. Para la compañía, los productos se adquirieron por importación paralela, algo que, según el retailer, en Chile es absolutamente legal y es resguardada por los derechos de propiedad industrial”, precisa la publicación.
Cabe destacar que, según la multitienda, detrás de la arremetida emprendida por las marcas deportivas “está el descontento por la venta de sus artículos a bajos precios. En efecto, en la demanda la empresa sostuvo que Under Armour busca poner término a un modelo de negocios que permite a consumidores comprar productos de grandes marcas a bajos precios”.