Ponerle atajo a las 7 plagas de que habla la Biblia. Encontrar cura hasta para el pidulle a través de los genes o sanar con milagrosas rocas volcánicas a compadritos cacho de paragua, son razones suficientes para que el artista visual, Herbert Lomb, decidiera realizar un documental sobre el auodenominado "Doctor" Miguel Dencil.
"Por su porfía en buscar la cura del hombre, ya sea con piedras milenarias, o mirando los genes de la salud en el color de los ojos es que se ganó mi admiración, por lo que es necesario que los chilenos lo conozcan", contó el cineasta.
Al naturista, que en el 2003 estuvo preso por el ejercicio ilegal de la profesión de médico cirujano, lo pillamos en pleno rodaje, mientras le rascaba el espinazo a un perro chico blanco en su consulta del pasaje República, en el centro de Santiago.
Entre libros, botellones con pócimas, restos de tumores enfrascados de compadritos que supuestamente sanó y una roca volcánica "milagrosa" que tiene chantada en su escritorio, el curandero de la lupa sacó pecho por la filmación: "Estar metido en un documental es un orgullo, y una forma de que el mundo conozca la verdad de la salud, y de mis descubrimientos como la cura contra el Sida. Es que remediarlo es como vencer un resfrío. Las enfermedades no existen, sino sólo los enfermos, lo dijo Hipócrates 500 años antes de Cristo y tenía toda la razón el hombre", se quebró como una oblea.
El naturista que asegura que por una diarrea no pudo recibirse de médico en Europa, sostiene que con los aminoácidos correctos y un buen color de ojos el enfermo está al otro lado. Agregó que el ex presidente de EE.UU., Bill Clinton, lo invitó para que diera a conocer su verdad: "Le hablaré de los genes".
FILMACIÓN
Dencil mira fijamente la cámara mientras el documentalista lo graba. Le balbucea que "tiene estudios en Francia, Inglaterra, EE.UU., España, México, Argentina y Alemania, "donde me grabaron en siete idiomas y la gente me aplaudió al terminar mi charla".
Cuenta que le da un poco de pena cuando lo quieren agarrar pa’l fideo y a todo su arsenal de curaciones, que por más de 50 años ha entregado no sólo a Chile sino al mundo.
El cineasta dice que quiere reivindicarlo.
"Es un apasionado con lo que hace, las 24 horas del día está con su bandera de lucha de los genes y la salud. Es un personaje mágico, donde la realidad se fusiona con la fantasía, de eso va a tratar el documental", remachó.
El cocido se llamará "La Biblia de la Salud" y Herbert espera que vea la luz el próximo verano.