Si bien nacieron como un aliado para el mundo audiovisual, hoy estos aparatos han avanzado a otros campos, y uno de ellos es el agrícola, donde cumplen un rol vital.
A nivel mundial, el uso de drones ha experimentado un crecimiento explosivo. Esto, porque muchos países optaron por estos aparatos no tripulados para usarlos en distintas áreas. Una de ellas es el sector agroindustrial.
Países como España, Estados Unidos, Suiza, Nueva Zelanda, China y Japón han implementado esta tecnología para el monitoreo de cultivos, análisis fotogramétricos (dimensión del lugar), aplicaciones fitosanitarias, entre muchas otras.
En Norteamérica y Europa, el uso de este método es relativamente nuevo, sin embargo, se prevé un crecimiento exponencial, y en el cual el agrícola será el segundo sector industrial con mayor uso de drones a niven planetario en los próximos 5 años.
Realidad nacional
En Chile, una de las compañías que se encuentra realizando esta novedosa técnica es Ecodrones, filial de la empresa aeronáutica Ecocopter, la cual se ha enfocado en el desarrollado de soluciones mediante al uso de los drones, principalmente orientados al ámbito industrial, en áreas como minería, energía, telecomunicaciones, agrícola y el sector forestal.
Específicamente en la agroindustria, la aplicación tradicional de plaguicidas se encuentra a la baja y en retirada en nuestro país, por tres motivos fundamentales: el método aéreo de pulverización se encuentra restringido por su incidencia en las zonas pobladas y cursos de agua; vehículos motorizados se ven limitados, debido a lo irregular del terreno; y la forma manual (cuadrilla bomba espalda) se ha visto afectada por la falta de mano de obra.
Sobre el beneficio de aplicar agroquímicos a través de drones, José Tomás Díaz, Project Manager de Ecodrones, explica que "estos dispositivos nos permiten, por medio de la 'agricultura de precisión' y sus cámaras multisensoriales, obtener mapeo completo del predio para identificar tempranamente plagas, evaluación de daños, índice de vegetación o análisis multitemporal, permitiendo así la toma de mejores decisiones", analizó.
Reforestación áerea: la solución para enfrentar el cambio climático
La lucha contra el cambio climático es otro de los motivos que llevó a las mentes creativas a recurrir a la utilización de drones. En España, CO2 Revolution los usa para crear ecosistemas completos y sostenibles. ¿De qué manera? Cargando los aparatos con cápsulas biodegradables y en su interior semillas inteligentes, junto con todos los elementos que necesita para su crecimiento, que los drones van lanzando.
Juan Carlos Sesma, fundador y CEO de CO2 Revolution, explica que el mayor problema al que se enfrenta el mundo es el cambio climático, por lo que ha buscado la forma más eficiente de combatirlo. "El propósito de la compañía es plantar 10 mil millones de árboles en los próximos 10 años, creando ecosistemas completos con la décima parte de costo y en la décima parte de tiempo".