El guripola de la comuna de Santiago, Pablo Zalaquett, presentó este viernes una querella contra quienes resulten responsables por el delito de desórdenes en la piteadera estudiantil del jueves en Ciudad Gótica.
Ese día Carabineros arrestó a 53 personas, de las cuales 43 pasaron al control de detención. El tribunal formalizó a tres personas por los desmanes y consideró que el resto habían sido apañados ilegalmente, ya que no había pruebas concretas de los delitos que les cargaban.
Zalaquett dijo que buscará la firma de responsabilizar a los coordinadores de las convocatorias cada vez que ocurran batallas campales como la vivida ayer.
"Tengo el derecho a expresarme, pero si se me ocurre hacer actos vandálicos tengo que responder. Este no es el Chile que yo quiero", chupeteó el jefe de Santiago, quien sentenció: "si el organizador no tiene la capacidad de controlar a su gente, tiene que entender que tiene que responder".