El Gran Sueño Pop: La guagua le llegó con depa y auto bajo el alita

Hace cuatro años, Karina Echeverría Muena vivía de allegada en la casa de su suegra de entonces. Con mucho esfuerzo logró independizarse y ahora arrienda una casa en Estación Central.

La profesora de educación básica del Colegio Teresiano San Gabriel de Independencia es fiel lectora del diario pop, y junto a su marido y un tío comenzó a juntar los cupones de El Gran Sueño Pop que entregaron a la barra cuatro autos Lifan 320 y un departamento ubicado cerca del Metro Santa Ana.

Y fue justamente la mujer de 36 años quien se quedó con el premio gordo, al adjudicarse el último sorteo que la hizo dueña de su primera vivienda y de un vehículo nuevecito de paquete.

"Estaba en la casa haciendo las cosas con mis dos hijas, yo me había olvidado del concurso, me dieron la noticia y no lo podía creer, cuando me dijeron por teléfono pensaba que era broma, me senté en la cama y me quedé callada, era la primera vez que ganaba algo, ni siquiera me había llevado un tarro de duraznos en una rifa", contó.

El premio provocó que la profe sintiera que se quitaba un peso de encima para siempre. "Lo que sentí fue alivio, fue una tranquilidad para mí, para mi familia porque uno siempre quiere tener su casa y eso requiere muchos trámites y plata. A mí me ha costado ene conseguir lo que tengo. Además tuve que pagar mis estudios", explicó.

Tan cachuda quedó Karina que llamó a su diario regalón para ver si la persona que la había contactado trabajaba acá, y cuando le dijeron que sí, respiró tranquila y dio gracias por la marraqueta bajo el brazo con que llegó Antonia, su guagua de cuatro meses que la acompañó a recibir las llaves del departamento y del auto.

Mientras tanto, el jefe de zona de Lifan, Pedro Pérez-Montt, dijo que quedaron contentos por haber colaborado con La Cuarta y anunció que piensan continuar con la alianza.

1° premio a Puente

El primer auto que regalamos se lo llevó María Jesús Avello, de la población San Guillermo de Puente Alto, que al momento de recibir la llamada gritó de felicidad. “Estaba tan feliz que grité de puro gusto por el autito que me gané. Pero mi familia se asustó y pensaban que un ratón andaba registrando la alacena”, contó.

El 2° se fue a San Beca

Griselda Gutiérrez fue la segunda ganadora de un auto. La dueña de casa de San Bernardo confesó que “se me olvidó un poco cómo manejar, pero tengo un excelente maestro, ya que mi marido Manuel es taxista”.

3°: Ayuda de arriba

El tercer Lifan contó con la ayuda celestial, ya que mientras Raúl Enríquez le daba el último adiós a su padre en el funeral, justo lo llamaron para contarle que se había ganado el auto. “Fue un regalo que él me mandó del Cielo, ya que era mecánico y sabe de calidad”, contó Enríquez.

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