Soportaron 69 días bajo tierra. El mundo entero estuvo pendiente de su rescate. Miles de millones de personas lloraron cuando los 33 mineros salieron a la superficie, sanos y salvos.
El 13 de octubre celebraron un año desde que salieron de la Pachamama, y la conmemoración estuvo llena de polémicas y problemas.
Antes, el 11 de mayo, en una exclusiva intergaláctica del diario pop, el minero José Ojeda solicitó la devolución del famoso papelito "estamos bien en el refugio los 33", el que el Presi Sebastián Piñera llevaba en el bolsillo en su gira presidencial.
"Quiero que me devuelva el papel porque yo lo escribí. Yo creo que está bien tenerlo un par de meses, pero no puede hacerse dueño de algo que yo hice", dijo a La Cuarta.
Ante semejante requerimiento, el Presidente Piñera contestó que "el mensaje es de todos los chilenos" y aseguró que se dejaría en un museo de Copiapó.
Así terminaba la historia del papelito, que incluyó incluso una recomendación de su esposa, Cecilia Morel, quien en Inglaterra le pidió "por favor no lo muestres".
Pese a que la mayoría de los 33 viajó por varias partes del mundo (El Caribe, Tierra Santa, Gran Bretaña, y Estados Unidos, entre otros países), muchos estuvieron mal de salud y señalaron que se sentían como el ajo.
Quizás por eso, cuando justo se cumplía un año del rescate, se supo que Carlos Mamani estuvo metido en un tete por violencia intrafamiliar por el cual fue formalizado.
Según su versión, todo se habría tratado de una defensa del honor mancillado como dicta la tradición boliviana.
En Copiapó se festejó el año del rescate y como memoria viva quedó el museo, inaugurado en medio de incidentes y protestas contra los dueños de la mina San José.
