Aunque sus hermanas movieron cielo, mar y tierra para encontrarle un hígado que le salvara la vida, Minerva Campos, de 33 años, presentó complicaciones en su estado en la noche del miércoles que la dejaron inviable para un trasplante.
La mujer, madre de 4 hijos y que tiene 15 semanas de gestación, se encuentra internada en la UCI del Hospital del Salvador conectada a un ventilador mecánico y en riesgo vital.
Según el testimonio de Sandra Campos, el calvario de Minerva empezó con una supuesta infección urinaria, que se trató en el Hospital Luis Tisné.
El 1 de agosto, al notar que no se le habían quitado las náuseas, vómitos, el cansancio ni la falta de apetito, volvió al hospital. Además, había desarrollado ictericia.
Tres días después, fue enviada al Hospital del Salvador con el diagnóstico de hepatitis fulminante. Ese mismo día fue puesta en prioridad nacional para el trasplante de hígado. Pero el empeoramiento de su estado ya no permite la operación.
El hijo que espera Minerva aún presenta actividad fetal, pero se desconoce hasta qué punto la enfermedad -que tiene a su mami entre la vida y la muerte- pudo haberle afectado.
El doc Jorge Sandoval, ginecólogo del Hospital Clínico de la Universidad de Chile, explicó que en este tipo de casos es improbable que el feto sobreviva. "Desafortunadamente, la hepatitis fulminante produce que elementos tóxicos contaminen la sangre, lo que origina que la actividad del organismo se vea alterada".
- ¿Hasta el cerebro?
- Sí, porque las toxinas dañan neuronas y ahí empieza a complicarse el estado de salud, ya que se afecta la actividad cerebral.
- ¿También puede sufrir daño el feto?
- Sí, porque los tóxicos pueden pasar a la placenta y afectarlo. Aunque ese daño sólo se puede dimensionar cuando nazca, aunque puede ser difícil...
- ¿Por qué?
- Puede que las toxinas, que atacan a todos los órganos, lleguen al útero y produzcan irritaciones que induzcan las contracciones y, por ende, pueda abortar.
- ¿Hay posibilidades de que el hijo sobreviva?
- Lo veo muy difícil. En primer lugar, porque sólo tiene 15 semanas de gestación. Por otro lado, si la madre está conectada a ventilador mecánico, puede que reciba menos oxígeno del que necesita. Incluso está el riesgo de que el feto muera o que se produzca el aborto.