"Anumka" se llama la "plantería" de Verónica Barra, una santiaguina que redescubrió el valor de lo verde y ofrece un regalo con otro significado para este Día de la Madre.
Que el mundo cambió, no hay duda. Y después de cumplir ya más de 50 días con el coronavirus viviendo como un enemigo silencioso entre nosotros, muchos creen que ha llegado el momento de disfrutar con las cosas simples de la vida.
Una de esas personas es Verónica Barra, dueña de "Anumka", una "plantería" como ella define a este emprendimiento que busca no sólo que redescubramos la belleza de lo simple, sino que además "dejemos de lado el materialismo al que estábamos mal acostumbrados y nos volvamos a volcar a la naturaleza".
Producto de la pandemia, muchos se dieron a la pega obligada de ordenar la casa y ahí Barra se dio cuenta de la oportunidad de llenar de plantas los espacios. "Ellas no sólo adornan, sino que dan colores, olores y, sobre todo, vida. Quizás eso ha sido la gran ganancia de este tiempo", cuenta la dueña de Anumka, que significa planta en mapudungún.
Lo natural
Por esas buenas vibras que encierran, Verónica cuenta que regalar una planta será la oportunidad perfecta para darle un nuevo sentido al Día de la Madre, que por primera vez se celebrará con una distancia social extraña, que en muchos casos nos privará de darle un abrazo fuerte a la persona que más amamos en el mundo.
"Lo bueno de que estén cerrados los mall será que al fin podremos regalar cosas simples, y qué mejor que una planta", cuenta Barra, que en Anumka tiene una amplia variedad de hojitas verdes, desde helechos a ficus, pequeños y grandes, de interior y exterior.
"Por el Día de la Madre, incluso, le agregaremos un chocolatito para que la mamá sienta todo nuestro cariño y calor", remata Verónica, que tiene plantas desde los 2.500 a los 27 mil pesos y las que llevará a la puerta de su casa, porque por un poco más incluirá el delivery. Es que no está fácil moverse por la ciudad en estos días.