“Como la soberana callampa”. Así reconocen sentirse muchas personas que han caído en el negocio de moda de Aculeo: compra y venta de terreno a bajo costo, pero con un uso de suelo más penca que ponerse a lustrar zapatos negros en camino de tierra.
El penca episodio viene afectando desde hace un tiempo a inocentones compradores que, obnubilados con tentadoras ofertas para adquirir un Paraíso en el campo, han sacudido el chanchito para ser propietarios y acabar con un ojo menos.
Trasquilado con esta acusación resultó el brasileño Fabricio Vasconcellos, quien miró hacia Aculeo para iniciar un pujante emprendimiento y meter solamente la puntita, solamente la puntita, solamente la puntita... El trípode bailarín compró un paquete de seis hectáreas por un monto cercano a los 200 palitos, terreno que comenzó a comercializar para hacerse el manso ni que negocio (vea la info donde sale lo que podría ganar).
En esta pará, y en la que los vecinos de Aculeo Afuera, Aculeo Medio y Aculeo Adentro las están pasando como las reverendas h..., salió gente al baile para alzar la voz e, incluso, hasta existe una página en el Féisbuc (Paine pueblo bueno de gente noble) donde patalean con Viagra y hasta se tiran unos memes bien mala onda del cabro.
Don Salvador, oriundo de Puente Alto y quien pagó ocho palos y medio por quedarse con 400 metros del terreno, se sintió callampeado así este porte y nos soltó la roca jurando que “me prometieron portón eléctrico, luz, agua y al final era un fraude. Al final compré un sitio que vale hongo, porque son terrenos de uso agrícola y no urbano y ahora tendré que botar lo que construí”, nos cuenta terrible de choriado don Salvita, agregando que “pagué todo en efectivo. El Fabricio parecía vampiro contando la plata”.
LA MUNI ATACA
Sin embargo, el atao mayor para Fabricio vino después, ya que invirtió en otro “terrenito” que lo enfrentó directamente con la Municipalidad de Paine. En esta pasá, en el pueblo donde hacen las mejores callampas del país acusan directamente al ex miembro de Axé Bahía de vender predios que están anegados.
Prueba de eso es que las propia muni instaló el tontolón cartel por Detroit del terreno, donde advierte a los potenciales compradores que cuiden su inversión: “Estás construyendo en zona de inundación”. O sea, el musculoso está hasta el loli con esta situación.
El jedi de la comuna donde nacen las mejores sandías, Diego Vergara, evitó referirse específicamente al caso de Fabricio, acusando que “por la codicia de los loteadores nos meten en un forro. No transformemos el campo chileno en villas y de forma fraudulenta. Esto es un negocio ilegal”.
Alzamos cuernófono para que el acusado nos contara la dura, pero este optó por decirnos que “todo era falso”.
