Era de esperarse que Fernando González, luego de irse de PLR en el ATP de Santiago frente a Thomaz Bellucci, soltara la pulenta de lo que pasó en un partido bastante piteado para el námber guan del tenis chileno.
Es así como toda la prensa esperó por el Feña en una agradable y heladita sala de prensa, ubicada al costado del court central de la hacienda de Chicureo.
Lo que ningún periodista se iba a imaginar era que el "Bombardero de La Reina" iba a preparar el discurso más corto que se ha visto en la historia del tenis nacional, con una conferencia de prensa que duró menos que la teleserie "Santiago City": 59 segundos.
Obviamente que la raqueta más pulenta de Chilito no estaba ni ahí con hablar de su derrota, de Daniela Castillo o si andaba de amigui con el wáter hace varios días, luego que se dijera que perdió por dolores de guata.
Ya cuando se le preguntó por su futuro, se le vio un poco más amigable y señaló que ahora su objetivo es ir tranquiléin al Abierto de México, que se realizará en donde una vez fue de vacaciones el Chavo del 8: Acapulco.
Sobre la esperada mocha por Copa Davis frente a Israel, el próximo 5, 6 y 7 de marzo, en el puerto pirata de Coquimbo, al Feña le salió todo el patriotismo, pues sabe que quedó en deuda con el público. Por eso dijo que "espero llegar a Coquimbo en buen estado para intentar devolverle la alegría al país cuando nos enfrentemos a Israel".
BELLUCCI MANDÓ CORTADO AL "CUATRO LETRAS" EN CHICUREO
Tuvo que sufrir, pero finalmente Thomaz Bellucci logró adjudicarse el Movistar Open en tres set, derrotando a Juan "Pico" Mónaco por 6-2, 0-6 y 6-4.
El brasileño comenzó bien el partido y ganó el primer set en tan sólo 41 minutos. Pero en la segunda manga, las vio negras y quedó en "cerapio", lo que hizo que hasta el más fanático de sus seguidores pensara que la corona se iba a Argentina.
Sin embargo, en una gran remontada el "heredero de Gustavo Kuerten" y verdugo de nuestro Fernando González se repuso y mandó cortado al "cuatro letras" en poco más de media hora.
Es que todo se definió rápido, gracias a un quiebre de servicio en el quinto juego, cuando logró quedar 3 a 2.
De ahí el match fue un mero trámite y Chicureo vio cómo el jugador que ocupa la casilla 35 del ATP alzaba la copa, posom.
