El monarca inglés ha dicho que quiere representar los valores del Reino Unido moderno.
Carlos III está a tanto de que el Reino Unido cambió, por lo que su coronación no podría quedarse atrás ni ser de la misma forma en que sucedió la última, ocurrida en 1953, cuando su mamá Isabel II llegó al trono con solo 25 años.
En aquella oportunidad el lujo se hizo notar de forma apoteósica. Y si bien, ahora también habrá harto brillo y dinero invertido, el actual monarca ha dejado en claro que quiere representar los valores del del Reino Unido actual, con diferentes etnias y religiones.
Las modificaciones
Una de sus primeras medidas fue modificar la ceremonia, en la que los roles principales correspondían a la aristocracia según la antigua tradición.
Ahora, las mujeres, personas de minorías étnicas y líderes de religiones no cristianas tendrán papeles ceremoniales que antes solo tenían los nobles, la mayoría de los cuales no fueron invitados.
La Abadía de Westminster tiene un espacio más bien limitado, por lo que en esta oportunidad se dio prioridad a quienes han sido condecorados por la monarquía por su contribución a la sociedad.
Hasta la ropa cambió
También se modificó el rito del juramento, ya que ahora incluirá la promesa de la Iglesia anglicana de fomentar un ambiente en el que personas de todas las confesiones y creencias puedan vivir libremente.
Respecto a la música, por primera vez en una coronación se escuchará un gospel -tal como sucedió en el matrimonio de Meghan Markle y el príncipe Harry, por las raices de la novia- y un canto en lengua galesa.
La ropa de Carlos III tampoco será con pantalones cortos como sus antecesores, de hecho vestirá su uniforme militar.