Su nombre era John Barnett, trabajó para la firma por 32 años y se encontraba en medio de un caso jurídico cuando se reportó su fallecimiento.
Este lunes se confirmó que un exempleado de Boeing llamado John Barnett falleció a sus 62 años, después de hacerse conocido por denunciar irregularidades en la empresa para la que trabajó por 32 años.
Según explicaron los peritos forenses del condado de Charleston, Estados Unidos, la muerte se dio a raíz de una herida “autoinfligida” el pasado 9 de marzo.
Es por esto que están en medio de las investigaciones policiales para conocer más detalles del caso, aseguraron a la BBC.
Durante los días previos, Barnett había estado testificando contra la compañía, tras haber denunciado una serie de irregularidades.
Si bien, se esperaba que el sábado estuviese en una nuevo interrogatorio, ese día no llegó.
Tras no tener noticias de él, fueron a buscarlo a su hotel. Ahí, hallaron su cuerpo en su camioneta, en el estacionamiento.
Las acusaciones de John Barnett contra Boeing
Hace cinco años le comentó al citado medio las situaciones que despertaban su preocupación.
En su relato, Barnett contó que los trabajadores habían sido presionados para instalar piezas de peor calidad en ciertos aviones, lo que podría poner en riesgo la seguridad.
Junto con ello, aseguró que había encontrado serios problemas en torno a los sistemas de oxígeno, los cuales podrían significar que una de cada cuatro máscaras no funcionaran en caso de emergencia.
Más adelante, también manifestó su preocupación en torno a la desaparición de componentes defectuosos y dijo que en ciertas situaciones se utilizaron piezas de los contenedores de chatarra para ponerlas en aviones.
Esto, según él, con el objetivo de evitar retrasos en la fabricación de las aeronaves.
Asimismo, afirmó que aunque había alertado a la empresa, desde esta no tomaron medidas en ese entonces.
Cabe destacar que dejó de trabajar en Boeing en 2017, cuando se jubiló por motivos de salud.
La respuesta de la compañía y del organismo regulador
Ante las afirmaciones de Barnett, desde la empresa han negado que sus acusaciones sean ciertas.
No obstante, una inspección efectuada por la Administración Federal de Aviación (FAA, por sus siglas en inglés) en 2017 aseveró que parte de sus estas tenían fundamento.
De hecho, desde el organismo estadounidense dijeron que se desconocía dónde estaban al menos 53 piezas “defectuosas”, por lo que se ordenó a la compañía que actuaran al respecto.
Sobre las problemáticas con los sistemas de oxígeno, desde Boeing reconocieron ese mismo año que detectaron algunas botellas recibidas del proveedor “que no se desplegaban correctamente”.
Sin embargo, negaron que estas estuviesen en alguno de sus aviones.
Aún así, durante la semana pasada, la FAA dijo en una auditoría que había registros de “múltiples casos en los que presuntamente esta no había cumplido los requisitos de control de calidad de fabricación”.
Tras la muerte del extrabajador de la firma, desde Boeing manifestaron su pésame: “Nos entristece el fallecimiento del señor Barnett, y nuestros pensamientos están con su familia y amigos”.