Al ser hallada por una vecina, Maritza Bravo dijo no recordar nada. Además de recibir golpes, su pelo fue cortado.
El hallazgo de Maritza Bravo generó sentimientos encontrados entre sus familiares. En extrañas circunstancias, la joven de 25 años que había desaparecido la semana pasada en cercanías de Curicó, apareció en Mejillones, región de Antofagasta, sin recordar nada.
Según informó Carabineros, Bravo fue ubicada a la altura del kilómetro 5 de la Ruta 272 deambulando sin rumbo fijo.
"Ella estaba muy desorientada y afectada psicológicamente. Lo único que se acuerda es que quedó en pana en su motocicleta y que la abordaron en un automóvil, que la subieron y que la habrían drogado, porque le hicieron consumir pastillas. No sabe cómo llegó hasta Mejillones", detalló el concejal Manuel Poblete a diario El Centro.
Claudia Varas, mujer que encontró a Maritza, explicó que "fue una pena enorme ver a una joven así, lo único que me interesa es que ella se pueda recuperar, poder abrazarla, porque no pude despedirme... pero los procedimientos policiales son así".
"Fue tremendo, estaba en shock", recordó, en entrevista con Mucho Gusto. "Lo único que podía entenderle es que ella tenía un hijito de 4 años", agregó.
Por su parte, Máximo Valdés, primo de la joven, aseguró al matinal que el caso "está en manos de la justicia. A mí me interesa que esto se esclarezca, que tratemos de pillar a estos tipos. Siempre he dicho que a mí me huele a secruesto. Aquí puede pasar cualquier cosa, nos podemos llevar cualquier sopresa, pero yo creo que aquí hay una banda especializada".