Más que caldeados están los ánimos entre los estudiantes secundarios y las autoridades, debido a la serie de tomas y movilizaciones que se han registrado durante las últimas horas en la capital y que ya suman 9 establecimientos en poder de los pingüinos.
Una de las jornadas más tensas se registró durante la noche del miércoles, en la comuna de Santiago, cuando un equipo de apóstoles de La Red que se encontraba en las afueras del Liceo Darío Salas, fue atacado violentamente por una turba de manifestantes.
“Cerca de las 8 y media hicimos un móvil con Ian Plattner, dirigente y vocero del Darío Salas, y cuando terminamos nos quedamos un rato para ver si había algo más que informar... 10 minutos después nos atacaron”, relató Francisco Sanfurgo, el apóstol que las vio peludas.
Sus atacantes, unos 50 cabezas de polera que salieron desde el establecimiento educacional, no sólo se conformaron con agarrarlos a piedras y palos, sino que además les chorearon los equipos y les prendieron fuego.
“No puedo asegurar que estos chicos hayan sido alumnos del Darío Salas, pero sí que salieron de él y que nos violentaron directamente. Nosotros tuvimos la intención de volver al móvil pero era demasiado peligroso”, señaló el apóstol que avaluó los daños en 90 millones de pesos.
El maletero ataque se desarrolló en medio de las amenazas de desalojo por parte de Carabineros, situación que se materializó horas más tarde y que continuó con los liceos Miguel de Cervantes y Confederación Suiza, en la misma comuna.
Luego del hecho, la Asociación Nacional de Televisión (ANATEL) emitió un comunicado en el que repudió todo ataque a los medios de comunicación y solidarizó con los apóstoles agredidos por los cabezas de polera.
Pese a ello, al cierre de esta edición los secundarios continuaron con la toma de otros nueve establecimientos emblemáticos, como el Liceo de Aplicación, el Liceo Amunátegui, el Internado Nacional Barros Arana (INBA), el Barros Borgoño y el Teresa Prats (Liceo 7), entre otros.
Según trascendió, los establecimientos movilizados evalúan su permanencia en el parelé y las tomas.
Las órdenes de desalojo emanaron desde la Municipalidad de Santiago, luego que el alcalde de la comuna, Pablo Zalaquett, no llegara a acuerdo con los estudiantes en toma, a quienes se les ofreció seguir movilizados pero asistiendo a clases.