Zalaquett hasta contó una anécdota con dos ministros en su casa. Recordó que uno de ellos “se descolocó”.
Luego de permanecer fuera de la escena política durante años, Pablo Zalaquett inesperadamente hoy está en el ojo del huracán. En una entrevista, el exalcalde se desahogó ante la polémica por sus secretas comidas entre empresarios y políticos.
“Hoy es fácil tachar a Pablo Zalaquett como alguien maquiavélico. Si creyera lo que se escribe de mí sería un crack. O sea, realmente yo me tendría que felicitar más”, lanzó en tercera persona el histórico militante UDI, en conversación con Ex-Ante.
Pese a reconocer que le han afectado los cuestionamientos, defendió su labor de “acercar” al mundo empresarial incluso con ministros. “Tengo una tranquilidad al 100%. Yo me siento orgulloso de lo que he hecho. Y lo volvería a hacer. Y voy a seguir haciéndolo, pero tomando las precauciones (...) Porque hoy en día hay tanta suspicacia en este país que nadie cree que las cosas se puedan hacer de buena forma”, reflexionó.
Sinceró que si se arrepiente de algo es del “dolor”. “Estoy muy cansado, he dormido muy poco, he sido asediado. Tengo mucho apoyo, incluso del mundo político, pero obviamente te lo dan muy por debajo. Siento mucha tristeza, mucha”, reconoció ante las críticas.
Zalaquett: “He tratado de ayudar a este Gobierno”
El exalcalde, que fue procesado por el Caso Penta y hoy figura como lobbista, contó que actualmente vive de “la comunicación estratégica” y que siente como vocación impulsar el diálogo en el país. De hecho, y considerando las polémicas visitas de ministros a su casa, sinceró que ha tratado de ayudar al Gobierno de Gabriel Boric. Eso sí, descartó una relación formal con el Ejecutivo.
“Lo único que yo he buscado es el diálogo. Yo te soy franco, me siento bastante tranquilo, creo que estos encuentros han sido un aporte para un país que no conversa. Incluso es súper raro lo que te voy a decir, pero yo creo que he tratado de ayudar a este Gobierno. Porque hay dos mundos que se enfrentan. Y así estamos estancados”, afirmó.
Incluso, contó una anécdota con dos ministros de Estado: “Cuando el ministro Nicolás Grau llegó, se descolocó. Porque yo le dije: Preséntate como persona. Y contó: yo estudié en el colegio Raimapu de La Florida -donde fui alcalde- y tengo tantos hijos. Y la Maisa (Rojas) lo mismo. Yo creo que jamás lo habían hecho en su vida. Hay quienes no habían conversado en dos años”.
Consultado sobre por qué las citas en su departamento no fueron registradas en la plataforma del lobby, contestó: “Es que aquí no hay ningún cliente mío. ¿Qué tiene que ver con mis clientes? Ese es el punto. Si yo me he tenido que vincular con alguna autoridad de gobierno para un cliente mío, siempre ha sido por ley de lobby. Pero esto no tiene nada que ver”.
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