La cifra de muertos a causa del terremoto y el tsunami del viernes pasado sigue subiendo, en una de las peores tragedias de ese país desde la Segunda Guerra Mundial.
La policía local entregó ayer el último recuento, donde informó que hay 3.373 personas fallecidas y 7.558 desaparecidas. En tanto, hay 1,897 heridos. Lo peor es que las autoridades de ese país temen que la lista aumente y no descartan que se llegue a una cifra de quince mil muertos.