Si algo aprendió Esteban Paredes en su experiencia religiosa en Copiapó es que el frigobar es sagrado. Sí, porque más allá de haber quedado con el rabo entre las piernas tras la boleta que le enchufó Cobresal, el volante del Chago comprobó que más vale deshidratarse un ratito que caer en la tentación, amén.
Y es que ya parece chiste la cuestión. Tras el turbio capítulo "Puerto Ordaz", todo lo que tenga buqué a hotel, mucamas y alcohol origina un cahuín. Y aunque esta vez no hubo jamón ni mermelada de por medio, en Santiago Morning quedó la distinguida esposa del zorro debido al accionar de algunos futbolistas. Eso sí, fue sólo por un ratito.
Claro, porque un mail acusete del Hotel Las Pircas dejó al capi autobusero y a Fernando Manríquez, Washington Torres, Miguel Hernández y Felipe Díaz con el currículum etílico más intoxicado que el de Mauri Pinilla. Si hasta hablaron de alfombras rotas y botellas de whisky en la habitación, guácala.
CON RABIA
¿Luego? José Basualdo compró la teleserie, se calentó más que con el escaldasono y les tiró las orejas por la prensa a sus dirigidos, Paredes incluido. Mientras, Luis Faúndez, el presi de la comisión fútbol, descartaba cualquier acto de indisciplina.
¿Tons? El don de la palabra nuevamente triunfó. Sí, porque dirigentes, cuerpo técnico y jugadores tomaron de la misma pastillita del día después y aclararon el asunto. Cuento corto: Entre cinco le dieron el bajo a dos latas de cervezas que había en el frigobar y lo demás es cuento.
¿Y las Escudo de litro? ¿Y las minas del Passapoga nortino? ¿La lluvia de proyectiles? ¿El karaoke con los trutros de pollo como micrófonos? ¡Todo farrrso! Y aunque el líder espiritual del lote, Esteban Paredes, reconoce que se mandaron un condoro, igual cree que se exageró.
"Me están haciendo un daño tremendo. Asumimos el error, uno tiene que dar la cara siempre, pero no era para agrandar tanto la cosa. Se están ensañando conmigo, nunca me han visto borracho por la calle y ahora se dicen estas cosas", se lamentó el capi del Chago.
en deuda Es más, Esteban Paredes explicó que la citación de ayer de ningún modo tuvo tendencia al callampazo y que luego de la conversa dio las disculpas correspondientes, pues "Basualdo me ha dado mucha confianza y yo no le he pagado muy bien".
Y como de los arrepentidos es el reino de los cielos, el volante aseguró que "hay que demostrar en la cancha que ya dimos vuelta la página. Estamos a dos puntos de pasar a O'Higgins, así que ahora depende de nosotros".
EL DETÉ NO SE ARREPIENTE
Cuando José Basualdo usó los micrófonos de una radiolina amiga pa' descargarse por el pastelazo de sus dirigidos, cualquiera hubiese pensado que Paredes y compañía tenían los días contados en el Chago. Es que el hombre estaba bravo. Pero una vez que aclaró el tema, el profe sostuvo que "conozco a los chicos, no destrozaron tanto, en realidad fue un vaso y cosas particulares". ¿O sea que la embarró con abrir el tarro antes de tiempo? "Para nada, era normal tener esa bronca, pero después cambió la actitud". ¿Y contará con los involucrados en el partido del wikén? "Aún está por verse", juró.
"CATALÁN LAVÓ LA ALFOMBRA"
No, no crea que su historia encaja en el programa hot del Rumpi. Si Miguel Catalán lavó la alfombra del hotel en Copiapó fue simplemente porque vació yodo y talco por accidente, nada más. Esa fue la explicación que dio Luis Faúndez ante la graaan mancha que adorna una de las habitaciones del Hotel Las Pircas. En todo caso, el presi de la comisión de fútbol aclaró que el jugador tendrá que responder por los gastos. ¿Y el alcohol? Según Faúndez, los jugadores estaban en su derecho y debían hidratarse. ¿Y el celular? Sólo se echó a perder el aparato y no hay más vueltas que darle.
Natalia Galaz A.