La progenitora de Tomás Domínguez, uno de los 6 acusados por una violación grupal a una chica de 20 años, habló con el medio argentino Clarín sobre la difícil situación que vive la familia.
La última conversación que tuvo Jorgelina con su hijo Tomás, fue el domingo por la noche cuando el joven le avisó que estaba en un after, tras esto no supo más de él. Días después volvió a saber de su hijo, esta vez a través de redes sociales cuando se enteró que estaba detenido por abuso sexual.
“Nos enteramos todo por las redes. Yo pensaba que lo habían agarrado porque tenía porro en la mochila. Pero jamás me hubiera imaginado que era por abuso”, declaró Jorgelina que aún no ha tenido contacto con su hijo, ya que este se encuentra entregando su testimonio en la policía. “La encargada de hablar con él me dijo que estaba angustiado y un poco nervioso. Pidió una muda de ropa y libros”.
Jorgelina cree que su hijo conoció al resto del grupo ese mismo día en el after, y que probablemente a la víctima también la conocieron en el mismo bar. Al único que frecuentaba con anterioridad era a Alexis, quien visitaba su casa.
La familia se encuentra en estado de shock y aún no saben qué pensar al respecto. “No lo puedo ni defender porque no sé lo que pasó. Siento que estoy muerta en vida. Es aberrante esta situación y si realmente hizo algo lo repudiamos. Me duele porque es mi hijo. Nosotros no le enseñamos a hacer eso”, además agrega que Tomás “era un chico que se llevaba bien con todo el mundo, no se llevaba mal con nadie y respetaba a las mujeres”.
Ni Jorgelina ni su hija han podido salir de la casa, ya que han recibido una serie de amenazas de muerte debido a las acusaciones en contra de Tomás. “Que merecemos la muerte como el chico, que me van a incendiar la casa. Pasaron la foto de mi casa por todas las redes. Mi hija tenía escraches con su nombre. No sabemos como seguir”. Confesó a Clarín.