Cerrando las puertas con candado y enarbolando una pancarta feminista en el frontis. Así se realizó la repentina toma de la casa central de la Universidad Católica la mañana de este viernes.
Se trata de la primera toma realizada en la casa de estudios desde hace más de 50 años. Las estudiantes, que se movilizan por una educación no sexista, denuncian constantes situaciones de machismo y acoso ocurridos dentro de la institución.
Buscan diálogo
En conversaciones con Radio Cooperativa, la vocera de las estudiantes, Daniela Pinto, explicó que sus motivos apuntan a una "falta de respuesta del rector" a las "exigencias que tenemos con respecto a la política de acoso sexual".
"Ayer entregamos un petitorio al rector, el cual no se dignó a recibir", indicó.
Las jóvenes piden un protocolo de acción y presentan un detallado petitorio para abrir el diálogo. La toma se realizó de forma pacífica y sin accidentes.
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