"Por suerte aún tengo fuerza en los golpes. Sigo jugando. porque aún me en encanta", remacha Fernando González de entrada, demostrando que a cinco años de su retiro aún tiene dinamita en esa bazuca que Dios le dio.
No hay duda que el Feña está en la historia del tenis chileno. Y como el de La Reina le dio hartas alegrías al país, luego de dejar la actividad se tomó un tiempo de descanso hasta que a comienzos de este año decidió comenzar a dar batalla en torneos de viejas glorias.
El "Bombardero" se mantiene ligado a su pasión. Junto con sudar en el Circuito Senior ahora entró de lleno en la actividad para fomentar el deporte blanco en los chicos.
"Estuve entre los 12 y 32 años viviendo todo el día para el tenis. Había que tomarse un descanso y volver renovado. Ahora estoy en eso", se sinceró "Gonzo", tras compartir con más de 600 niños en la Copa Tenis para Chile, en Estación Central.
En la actividad, González se dejó querer por los peques y hasta compartió un raqueteo con su polola, Luciana Aymar. La ex reina del hockey césped argentino y quien se arranchó en nuestra patria porque el amor es más fuerte.
BAJANDO LOS KILOS GANADOS
Y como el corazón todo lo cura y lo puede, González se encuentra en su mejor momento físico, tras colgar la jubilación, y aunque reconoce que la sufrió tras el retiro, se puso las pilas para volver a transpirar en los torneos de veteranos, donde le ha ido ahí nomás.
"Me he visto obligado a entrenar mucho más. Subí varios kilos cuando me retiré. Ahora estoy bajando. Es normal", cuenta entre risas el ex número cinco del mundo en el ranking ATP.
Y para rematar, fiel a su estilo, le prestó todo el ropero a las nuevas generaciones. Asegurando que ya vendrán los futuros campeones que le cambiarán la cara al tenis nacional.
"Es algo de tiempo, estoy convencido que hay material y talento. Christian Garin y Nicolás Jarry pueden estar más arriba. Pero van a volver los tiempos en que la gente vibraba con el tenis", remachó el medallista olímpico en Atenas 2004 y Beijing 2008.
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