Cacha el "Fidget Spinner": El juego furor entre los broquitas

En el pasado las bolitas eran el juego de moda en los colegios. Luego, le tocó el turno al caballito de bronce y al cubo Rubik, hasta que los pokemones cautivaron a los escolares.

Pero todo eso quedó en el pasado. Ahora los cabros no se despegan de un nuevo chiche: se trata del "Fidget Spinner" (algo así como Girador Inquieto), que partió en Estados Unidos y ahora es furor entre los adolescentes del país.

La gracia es que este dispositivo tiene tres puntas con un centro giratorio y cuando uno le da unas vueltecitas agarra velocidad y ahí viene lo peludo, ya que tiene que mantener el equilibrio con un puro dedo.

¿Pero por qué algo tan sencillo tiene locos a los lolos? ¿Ah?

Ricardo Valenzuela, del liceo Bicentenario Italia, en Nataniel Cox 1851, que ya jugó este juego, sopló que "es la sensación de mi colegio. Por la novedad y sirve para hacer algo mientras uno está en el cole. Incluso, algunos traen para vender y se les agota el mismo día", reveló.

El pequeño juguete que se sostiene con un par de dedos fue inventado para ayudar a niños con autismo o para los peques que tenían déficit atencional pa' disminuir la ansiedad y el estrés.

En Santiago se puede pillar en las afueras del mall Costanera Center, pedir por Aliexpress o buscar en varias tiendas que ya lo venden, aunque algunos dicen que hay listas de espera.

Boom comercial

Una que cachó el boom que causaría fue la comerciante Francisca Sandoval.

La encargada de la empresa "Requeteofertas", ubicado en Salvador Sanfuentes 2352, relató al diario pop que "ha sido éxito de venta. Era un producto que le había ido muy bien en Estados Unidos. Supuestamente el juego te relaja y te atrapa. Lo trajimos y se empezaron a vender mucho.

Tuvimos que importar por avión para que llegaran más rápido. Se nos hizo nada los que trajimos, es heavy cómo los papás llaman y nos dicen que sus hijos necesitan uno".

Agregó que "el otro día vino un niño a la tienda y justo se nos habían acabado. Se puso a llorar porque el que tenía ya no servía. Así de fuerte es el impacto que genera en los adolescentes".

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