El verano no se quiere ir ni a palos de la capital, y así quedó claro ayer, cuando el calor extremo se ensañó con los santiaguinos que se derritieron con 36,8 grados, la temperatura más alta de la historia registrada en un mes de marzo.
Y aunque muchos intentaron evitar el caregallo quedándose en lugares con sombra o poniéndose ropita ligera, la intensa temperatura se hizo sentir igual, convirtiendo las calles en verdaderas parrillas al aire libre.
Los 36,8 grados de ayer se metieron al bolsillo los antiguos récord históricos que teníamos en Santiago para marzo y que eran 34,8º en 1997, 35,2º en 2012 y 35,5º de hace 10 días.
"Absolutamente, se batió el récord histórico", confirmó Luis Salazar, meteorólogo de la Dirección Meteorológica de Chile.
Para que cache, sólo a la sombra ya hacían 35º a eso de las 14:30 en Santiago, y en Pudahuel, la comuna más ardiente de la capital, el peak llegó a ser de 36.8º a las 15:47 hrs, seguido de La Florida con 36,6°.
Para qué decir de las zonas más afectadas por la estrella solar en nuestro terruño, como habitualmente lo son San Felipe y Llay-Llay, que sorportaron 37.8º, seguidos de Los Andes, con 35.7º.
Verano implacable
Los caperuzos de la Dirección Meteorológica de Chile confirmaron que este verano se convirtió en uno de los más ardientes de la historia.
"Sin lugar a dudas pudo ser este verano uno de los más calurosos, ya que en febrero las temperaturas estuvieron por sobre el promedio. Y todo esto es una consecuencia del calentamiento global", advirtió el meteorólogo Luis Salazar. Mientras que el capo del clima de TVN, Iván Torres, asegura bien rotundo que "sin duda este verano fue uno de los más calurosos tras 15 o 20 años".
En todo caso el caregallo nos empezará a dar respiro, ya que hoy la máxima bajará a 31°, mientras que el domingo llegará a 27°. El lunes la cosa será más agradable con 24 grados y el martes incluso hay anunciadas algunas gotitas.
