''Gata'' Fernández: ''Fui caradura y le pedí una remera a Salas''

A Gastón Fernández le bastó un mes y medio en Chile para demostrar que es más que el antónimo estético del "Kalule", Clarence Acuña, Huaquipán y tantos otros próceres de la belleza abstracta. Sí, un "lindo gatito", dirían algunos, pero esa cualidad no sirve a la hora de meter un pase milimétrico o vacunar al oponente. En ese instante hay que reemplazar el ronroneo por el rugido del León.

Es cierto, su debut fue tibio ante Estudiantes de La Plata, su ex baticueva, pero frente a Peñarol se desató. Con dos goles, el peliteñido hizo olvidar a Patricio Ru… ¿Cómo era? Da lo mismo. El punto es que la "Gata" se complementó a la perfección con las nuevas figuras y ayer lo ratificó al ser el lápiz con la punta más gruesa en el amistoso con San Luis. En 68 minutos dio un pase gol, marcó, tiró besos y arrancó suspiros, ¿qué tal?

"El equipo está en otra etapa, con un recambio muy marcado. Debemos tomarlo con responsabilidad, humildad y con los pies bien puestos sobre la tierra. Con trabajo y dedicación, como lo estamos haciendo, y de la mano del cuerpo técnico, los resultados van a llegar", indicó Fernández a La Cuarta, la rubia artificial.

-Cuando llegaste se dijo que tu presencia iba a jerarquizar el fútbol chileno. ¿Qué opinas de eso? 

-A uno lo pueden catalogar de muchas maneras. Para mí es un orgullo que parte del medio y del ambiente tenga ese pensamiento sobre mí, pero también soy muy realista, los jugadores se ganan el respeto dentro de la cancha. Vine con esa idea, enseñar las cosas buenas que he hecho en mi carrera.

-¿Cómo te convenció el Seba Beccacece?

-Por su forma de vivir el fútbol, me identifico con la idea de jugar en equipos ofensivos, con la intención de buscar siempre el arco rival. Pero más allá de lo que podía decirme para tentarme, también era un punto importante para mí salir de Argentina a una institución grande y buscar triunfos en un país vecino. Es la meta de todo futbolista. El desafío lo tomé con muchas ganas, por lo que veo fue una decisión muy acertada.

-¿Lo ideal es mantener la posición de enganche?

-Lo hablé con Sebastián… A mi entender, donde puedo funcionar de mejor manera es estando lo más cerca del área posible, junto a los delanteros. A partir de ahí el técnico sabe que  puede contar conmigo para lo que sea, donde él lo estime conveniente. Quiero que todos sepan que vengo con mucha disposición para ayudar al equipo.

-¿El fantasma de doping ya no es tema?

-La verdad es que cuando ocurrió sentí un poco de incomodidad. Lo que sí, estuve tranquilo desde el primer momento en que se conoció la noticia, porque jamás con el doctor de Estudiantes o el propio club fuimos en contra del reglamento. Sabemos que el medicamento fue informado, lo declaramos y no era la primera vez que estábamos en una situación así. Creo que no vamos a tener problemas y que podré jugar tranquilamente.

-Has dicho que uno de tus ídolos es el Matador Salas…

-Sí, es y lo será. Cuando uno es joven y empieza a crecer en este ambiente, busca un estilo de jugador, verte reflejado en alguien importante. Esa persona fue Marcelo. Tuve la suerte de haber compartido plantel con él en River y conocerlo humanamente. Así que hoy, con la posibilidad de vestir esta camiseta sabiendo que él es un ídolo de la institución, para mí tiene un sabor especial. Ojalá tengamos un poquito de la suerte que tuvo él con estos colores.

-¿Y cómo fue contigo el crack? 

- Yo estaba iniciando mi carrera de juveniles en River, y debo contarlo… en algún momento fui caradura y le pedí una remera, jajajá. Siempre estábamos pendientes de los jugadores de Primera. Imagínate, llegó un día y tenerlo cerca era muy lindo.

-¿Te acuerdas de la semi de la Libertadores del 96?

-Y claro, andaba por los 12 años. Estuve en la cancha y obviamente hinchaba por River, jajajá. Así son las vueltas de la vida, hoy estoy en este club. Me acuerdo que fue una llave pareja, después River termina siendo campeón.

-¡Tsss! ¿Y el penal a Valencia?

-¿Ah?

-¡Naaa! Al menos nos desquitamos con la Copa América 2015 y la Centenario...

-Esa última fue compleja. Para mala suerte la vimos en La Serena, con todos nuestros compañeros. Sufrimos un poco las cargadas de ellos. Creo que la Selección Chilena está pasando por un gran momento, con jugadores a altísimo nivel.

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