En el pretérito imperfecto quedaron aquellos días en que a los deportistas se les alentaba con un "cuchara, cuchillo, ánimo chiquillos". Y sin postre, por cierto. ¿Y ahora? La cosa es con más pedigrí, coreografías, ejercicios de respiración, pompones y medidas perfectas, para envidia de Nelson Mauri, quien hace años incursionó en el mundillo de las cheerleaders.
Pero una cosa es una cosa y otra es otra, pueh. Claro, porque así como no es lo mismo decir "un picaporte" que un..., usted cacha, "de este porte", tampoco lo es la animación unisex con baile y música, que las barras al estilo gringou. Es que son palabras mayores, así como la copa del corpiño y la actitud de las chiquillas. ¿La buena noticia? Que Chile tendrá su propio ramillete.
¿Le suenan los "Felinos" del fútbol americano, ah? Se trata de un team floridano que participa en la Liga Nacional (compiten equipos de Iquique a Osorno) y que ahora quiere innovar con sus propias gatas fieras para darle un toque sensual a la actividad, como si se tratara de diosas de Dallas o San Diego, oh my gosh!
Por eso, los "Felinos" llamaron a un casting pa' dar con las féminas que cumplan con el perfil. "Deben ser chicas de 18 años en adelante, con condiciones deportivas y de baile, buena memoria coreográfica, personalidad, carisma y simpatía", señaló Mónica Saldías, jefa de marketing de la liga jaguar de fútbol americano.
¿Balance? Según la experta, las diosas que se han presentado cachan que la Liga está llena de jugadores "súper brutos", que quieren recrear la vista con ellas. "Lo importante es que no les dé vergüenza y que le saquen partido al uniforme sexy", avisó Mónica, quien confirmó que el domingo 15 de abril, en el Complejo deportivo de La Araucana (Walker Martínez 2295) se desarrollará la tercera parte y final del casting.
Hasta ahora, son ocho las bellezas clasificadas (se han presentado cerca de treinta féminas), y del ramillete destacan Nicole Huala, estudiante de ingeniería en construcción; Francisca Martínez, futura enfermera; Caro Campos, estudiante de ingeniería comercial; y Paulita Severino, quien pese a tener 17 años no se achicó ante sus competidoras a la hora de ronronear.