La mansaca en la venta de entradas y el centenar de personas que alentaba a los jugadores alrededor de la cancha, no desconcentró a Pablo Guede.
El entrenador de Colo Colo ordenó que sus "bendecidos" hicieran una práctica suave, mientras le sacaba el jugo a quienes lo ven desde la banca.
Ejercicios tácticos y de definición fueron la tónica del primer entrenamiento de la semana. Sin embargo, en medio del trabajo, el estratega se dio el tiempo para conversar con Esteban Pavez y Octavio Rivero.
LAS INSTRUCCIONES DE GUEDE
El "hablamiento" fue por separado y en estricto misterio, aunque pudimos cachar que se trataba de lo que ambos jugadores deberán hacer en el trascendental duelo con Antofagasta, este domingo al mediodía.