Si el lunes los saqueros le declaraban la guerra del pito a Rubén Selman y Carlos Chandía, ahora sumaron otra batalla para definir qué xuxa pasó en el gol anulado de Cobreloa.
La mansaca quedó cuando Eduardo Gamboa cobró falta contra Johnny Herrera, en el momento que el zorruno Diego Barrios anotaba para el equipo de Don Nelson. El juez vio que "Superboy" tenía controlada la pelota y dejó sin celebración a los loínos.
El primero que saltó fue Rubén Selman, quien reglamento en mano aclaró que "el portero está facultado para controlar el balón con las manos y brazos. En este caso el jugador Herrera la tocó, pero nunca controló, por lo que fue un mal cobro", dijo a La Cuarta el ex pito.
Por otro lado, Mario Sánchez, un viejo crack del pito, salió en defensa de Gamboa. "Lo conversé con algunos miembros de la comisión y el actuar del árbitro estuvo correcto. Estamos claros que el jugador Roco convierte una falta y eso se cobra", acotó el ex juez a La Cuarta.
La guerra santa continuará mañana, cuando Enrique Osses pite la final.
