“Mi hijo estaba desnudo y ella salió con una cámara a sacarnos fotos. Y nosotros sin saber para qué quería las fotos”, explicó una de las denunciantes.
Tras la viralización de un registro que da cuenta del momento exacto en el que una mujer expulsó a una joven de la playa Metri de Puerto Montt, la afectada rompió el silencio.
Se trata de Fernanda Nieto, quien conversó con Buenos días a todos.
“Yo estaba tranquila en la playa, en las rocas, quería tener un tiempo para mí y estar tomando sol. Pasé por la playa y vi que había mucha gente así que me fui a las piedras, caminé con cuidado, no había ningún cerco y encontré una piedra donde podía sentarme. Ahí estuve un buen rato”, relató.
Asimismo, explicó que “la señora me saludó, me dijo algo de la universidad. Seguí tomando sol, la señora estaba mirando por la ventana, me repitió lo de la universidad. Después de tres horas la señora llegó muy molesta. Yo estaba sola”.
“Yo no estaba haciendo nada malo, ella estaba en su metro cuadrado y yo estaba en el mío”, añadió.
Finalmente, precisó que “llega esta señora y me dice ‘ya te dije que te vayas’. Yo en ningún momento lo escuché, pero tampoco es la forma”.
Por su parte, Rocío Saldivia, otra afectada, contó al matinal de TVN que ya ha sido expulsada cinco veces por la misma mujer.
“Con mi familia fuimos a las playa el 8 de diciembre. Hemos ido como cinco veces a la playa y las cinco veces nos han echado. En ese sector ellos hicieron camping, cobran para entrar. El acceso por el que entró Fernanda, ese acceso tiene muchas piedras, entonces ellas cobran por entrar por el sitio que sí es un propiedad”, explicó.
“Siempre con el mismo discurso”
Además, contó que en “el 2019 esa casa no estaba, pero sí ya estaba demarcado el camping. A mí esta señora nos echó de l playa, abajo del camping. Nosotros pasamos por la orilla. Ella salió a echarnos y yo estaba con mis dos hijos. Mi hijo estaba desnudo y ella salió con una cámara a sacarnos fotos y nosotros sin saber para qué quería las fotos”.
“Se nos acercó como representante de una universidad para la conservación, le pregunté qué conservaban, empezó a decirnos que nos teníamos que ir, siempre con el mismo discurso. Le pedimos papeles y le dijimos que íbamos a llamar a la Armada para saber si era cierto. Saqué mi celular y ella se fue”, concluyó.
Temas Relacionados
