Los hermanos extranjeros que viven en el país ya son parte de nosotros, por lo mismo no es extraño que también sus corazones palpiten con los colores de algún equipo nacional.
Es por esto que en el CDF no los quisieron dejar fuera y en la previa del derbi universitario N°162, anticiparon el partido con una familia de Haití y un paisano de Colombia, que penan y mueren por el azul y la armadura franjeada.
"Este spot busca retratar el fútbol como una herramienta de integración social, que invita a nuevos fanáticos a sumarse a la pasión por los colores de los diferentes equipos de nuestro torneo, independiente de su lugar de nacimiento: Porque hincha se nace, pero también se hace", explicaron en la señal.
Así, Jean Baptist Milov, uno más de los haitianos que ha llegado a forjar sus sueños a nuestro país, abrió la puerta de su casa para demostrar el amor que le tiene al Bulla junto con a su prole, tanto así que bautizó a uno de sus hijos en honor a Igor Lichnovsky como "Milnovsky".
"Soy fanático 100% de la 'U'. Yo la conocía desde que estaba en Haití, pero cuando llegué a Chile en el 2011, año en el que estaba de entrenador Sampaoli, comencé a seguir los partidos y me volví hincha, al igual que toda mi familia. La 'U' es mi vida. Me gustan todos los jugadores, pero Johnny Herrera, Pinilla y Beausejour son mis preferidos", comentó Jean Milov, que el domingo anticipa un 3-0 a favor del "León" de Hoyos.
De Cali a San Carlos
La misma pasión, pero por la Cato, siente Cristián Perea, quien llegó desde Cali hace cuatro años y ahora se considera un cruzado más.
"Me hice algunos amigos y me preguntaron qué equipo me gustaba acá. Les dije que ninguno. De ese día me llevaron a ver a la Católica y comenzó este amor. Me recuerda mucho a mi Deportivo Cali por la forma de jugar", contó Perea, quien también se la jugó apoyando a Mario Salas, no como otros.
"Al profe hay que alentarlo siempre, no hay que olvidar que nos dio nuestro primer bicampeonato. Tanto así, que vamos a ganar 2-1 y lo celebraremos bailando salsa en la galería", vaticinó a puro saborrrrr.