¡Hay que tener perso! Príncipe azul llegó sin caballo a pedir casorio

"Estoy buscando a mi princesa...me dijeron que estaba en este lugar. Es una persona especial para mí, porque desde que la vi me enamoré de ella".

Con estas románticas palabras, dignas del poeta y cantante Ricardo Arjona, un joven publicista de 28 años ingresó a una ofis en Antofagasta cerca de la una de la tarde de ayer para pedir la mano de su Dulcinea.

El gesto, que dejó chica las novelas rosas de Corin Tellado, ya lo dejaba como rey, pero no contento con eso, Daniel Morales llegó vestido con un traje y una capa azul, cargando flores y con corona incluida.

Carla Fuentes, en esos momentos la novia con el pecho más inflado de Chile, se levantó de su puesto de trabajo en la Tesorería de la muni de Antofa, y toda cocoroca le entregó su piececito desnudo para que el Príncipe Azul le probara la zapatilla. Y como era obvio, el tato le calzó perfecto a la Cenicienta nortina.

El cabro al toque le pidió a su princesa que le diera la pasada: "Mi amor estoy aquí porque cumpliremos tres años y quiero frente a todo este público pedirte si aceptas ser mi esposa".

A la chica no le quedó otra que decirle que sí, delante de todos sus colegas de pega: "Por supuesto que sí", y todo el mundo comenzó a batir las palmas.

AMOR

Daniel y Carla se conocieron gracias a una tía de él que los presentó. Entonces comenzaron una bonita amistad y ese sentimiento no tardó en transformarse en amor. Más de una vez durante los 36 meses que llevan juntos, habían amasado la idea de casarse.

Fue entonces que el publicista comenzó a cranear la forma de pedírselo de manera original: "Quería ir a su trabajo y sorprenderla de otra forma, entonces mi mamá me ayudó a planear algo más grande y a disfrazarme para mostrar algo bonito".

Daniel, que a estas alturas es ídolo de las antofagastinas, remachó que la familia lo ayudó a confeccionar el traje y que la idea del Príncipe Azul sin caballo nació "porque ambos somos cristianos y queremos hacer una boda fuera de lo común, sin anillos. Por eso quise hacer algo especial que ella recordara para siempre. Y el zapato fue lo más simbólico".

La novia más chocha de Chile con el ramo de flores en la mano, contó a La Cuarta, que "todo fue una gran sorpresa, nunca me lo esperé. Nunca se me pasó por la mente que me iba a pedir la mano".

MANSA BOA

Después de esto, obvio que cualquier boda que linde con la normalidad les quedó chico. Y ya están pensando en algo bueno. Ah...y como la novia trabaja en la muni, ya comprometieron a la alcaldesa, Karen Rojo, como madrina.

"El matrimonio se viene en agosto. Igual estamos preparando algo lindo y fuera de lo común, más bonito que lo de hoy", se quebró como una oblea el novio.

Después de la media producción, la Cenicienta ya no se conforma con cualquier cosa: "Me gustaría un matrimonio con familia y amigos. Pero con algo súper especial".

COMPARTIR NOTA